Tras cuatro meses consecutivos de de contratación de empleados, el desempleo en los Estados Unidos se redujo en noviembre al 7%, su nivel más bajo desde noviembre de 2008. La creación de empleo, en tanto, superó las estimaciones, según datos publicados el viernes por el departamento de Trabajo.
La tasa de desempleo retrocedió 0,3 punto porcentual en relación a octubre, mientras que la creación de empleos netos no agrícolas fue de 203.000, superando las previsiones de los analistas, que estimaban el desempleo en leve descenso, a 7,2%, con 188.000 nuevos contratos laborales.
El número de desempleados ha caído debido a que algunos trabajadores federales que fueron contados como desempleados en octubre volvieron a trabajar tras una paralización parcial del Gobierno de 16 días en octubre (shutdown)
El gasto de consumo, en tanto, aumentó 0,3% en octubre. Sin embargo, algunas presiones sobre la inflación ofrecieron una nota de cautela para la Reserva Federal a medida que el banco central evalúa el futuro de su programa de compras de bonos.
El Departamento de Comercio dijo que el gasto del consumidor creció un 0,3 por ciento tras haber aumentado un 0,2 por ciento en septiembre.
Economistas consultados por Reuters esperaban que el gasto en consumo, que representa cerca del 70% de la actividad económica de Estados Unidos, subiera un 0,2 por ciento en octubre.
El ingreso personal en octubre cayó un 0,1 por ciento, el primer declive desde enero, tras haber subido un 0,5 por ciento en septiembre, mostró el informe.
Buenas noticias para el PIB
Los datos de desempleo y consumo se han publicado un días después de los correspondientes al Producto Interior Bruto (PIB). El Departamento de Comercio indicó el jueves que la economía creció más rápido de lo estimado inicialmente en el tercer trimestre, sobre todo porque las empresas engrosaron sus inventarios.
Según los últimos datos oficiales, el PIB de los Estados Unidos creció a una tasa anual de un 3,6% en vez del 2,8%o calculado previamente.
La cifra del tercer trimestre es la más veloz desde el primer trimestre del 2012 y marcó una aceleración en comparación al crecimiento del 2,5 por ciento del segundo trimestre, aunque los economistas prevén un crecimiento más lento en los últimos meses del año.
Las empresas acumularon 116.500 millones de dólares en inventarios, el mayor incremento desde el primer trimestre de 1998. Eso se compara con estimaciones anteriores de 86.000 millones de dólares.
"Como la enorme acumulación de inventarios pudo haber sido involuntaria, probablemente veamos una reducción de los inventarios este trimestre que supondrá algunos riesgos a la baja para el rendimiento del PIB del cuarto trimestre", afirmó a Reuters Millan Mulraine, economista senior de TD Securities en Nueva York.
La fuerte acumulación de inventarios ante una desaceleración de la demanda interna significa que las empresas necesitarán reducir sus existencias, lo que pesará sobre el crecimiento del PIB en el trimestre actual.
Las estimaciones para el crecimiento del PIB en el cuarto trimestre son actualmente menores a un 2 por ciento.