Siria: más de 1.000 cristianos fueron asesinados desde el comienzo de la guerra civil

El patriarca Gregorios III Laham, que fue recibido por el papa Francisco, denunció ataques islámicos contra las minorías religiosas. "No existe un lugar seguro en Siria. En cada momento y lugar puedes morir por una bomba", declaró

AFP 163

Más de 1.000 cristianos fueron asesinados desde el comienzo del conflicto en Siria, mientras centenares de miles abandonaron sus lugares de residencia y unos 450.000 lograron escapar al exterior, informó el patriarca sirio de la Iglesia Greco-Católica Melquita, Gregorios III Laham.

Según el patriarca, que fue recibido por el papa Francisco en el Vaticano, la comunidad cristiana siria afectada por la guerra civil entre fuerzas rebeldes y el régimen de Bashar Al Assad lo ha perdido todo: casas, negocios, empresas.

El religioso afirmó que la amenaza para los cristianos son los cerca de 2.000 grupos de fundamentalistas islámicos que combaten contra el gobierno sirio y atacan a las minorías religiosas.

"No existe un lugar seguro en Siria. En cada momento y en cualquier lugar puedes morir por una bomba, por un misil, por un proyectil, por callar un secuestro a cambio de dinero. El caos amenaza a todos", aseguró Gregorios III Laham.

"Ni hablar de la angustia que reina en nuestras parroquias: dudas, miedo, ansiedad, depresión. La pérdida de un marido, de una madre, de una hermana, de un pariente, de un amigo. Y luego los secuestrados, los refugiados", añadió el religioso sobre el conflicto bélico que comenzó a principios de 2011.

Reuters 163

Por otro lado, este sábado al menos 20 personas, entre ellas siete mujeres y un niño, murieron en un ataque aéreo del ejército sobre la ciudad de Al Bab, en el norte de la provincia de Alepo, según comunicó la ONG opositora Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

El informe describe que helicópteros del régimen lanzaron sobre la ciudad barriles de explosivos, causando importantes daños.

La oposición divulgó en Internet vídeos donde se ven edificios y vehículos destruidos. Una de las imágenes muestra dos hombres intentado abrir la puerta de un camión, en cuya cabina hay un hombre al parecer muerto. Junto al camión se ve también un hombre herido en la cabeza al lado de la moto que conducía.

El gobierno de Al Assad es acusado por la oposición y los gobiernos extranjeros de lanzar barriles de explosivos sobre objetivos civiles. El jueves pasado, en Alepo, el ejército también lanzó desde un helicóptero barriles de petróleo en el sector de Wadi Qadi Askar, causando la muerte de diez personas, informó el OSDH.

El departamento de Estado norteamericano describió esas armas como "bombas incendiarias que contienen material inflamable y puede ser comparado al napalm".