El gobierno nacional amplió sus gastos en $18.179,9 millones a un mes de que finalice el año, y acumuló así una expansión del uso de recursos de casi $100.000 millones en lo que va del año, los cuales en su mayor parte fueron financiados con reservas del Banco Central y emisión primaria de dinero.
Por medio de la Decisión Administrativa 1/2013, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich y el ministro de Economía, autorizaron mayores desembolsos a los originalmente autorizados por el Congreso.
El 85% de la ampliación del gasto fue distribuido en 53 planillas y se financia con ingresos recaudados por aportes y contribuciones a la Seguridad Social, no contemplados en el Presupuesto votado por el Congreso; el resto se cubre con mayor déficit fiscal.
Además, le asignó otros $1.450,6 millones a lo ya presupuestado del Poder Judicial, según consta en el Boletín Oficial.
A inicios del mes, el 8 de noviembre, el Gobierno dispuso una ampliación de $80.735 millones en el presupuesto 2013 mediante un decreto de necesidad y urgencia.
Por entonces, el argumento señalaba que de lo contrario podría correrse "el riesgo de paralizar el habitual y correcto funcionamiento del Estado nacional y de no estar en condiciones de atender sueldos y salarios".