El Senado aprobó la mayoría de una reforma fiscal que busca aumentar la recaudación en México y que incrementa los impuestos a los que más ganan, grava la comida "chatarra" y sube la tasa impositiva en las fronteras, en medio de críticas de algunos legisladores opositores por considerar que afectará el empleo, y de grupos empresariales que advierten buscarán ampararse para intentar evitar la aplicación de algunas modificaciones.
El plan fiscal, previamente aprobado en la Cámara de Diputados, fue discutido en el Senado en una sesión que inició la tarde del martes y concluyó la madrugada del miércoles luego de que los senadores del conservador y opositor a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Partido_Acci%C3%B3n_Nacional_(M%C3%A9xico)" rel="noopener noreferrer" Partido Acción Nacional/a (PAN) anunciaran que se retiraban ante lo que veían como una negativa a escuchar sus críticas.
El PAN, que gobernó el país entre 2000 y 2012, es la segunda fuerza en la cámara alta y aunque se opuso a buena parte de la reforma fiscal, hizo particulares críticas a la propuesta de incrementar de 11% a 16% el impuesto al valor agregado en las fronteras para homologar la tasa que prevalece en todo el país.
El partido ha argumentado, en coincidencia con grupos industriales y empresariales, que esa medida se traduciría en un posible incremento de costos para las empresas y daños al empleo, además del aumento en los precios de productos.
Las partes aprobadas de la reforma fueron respaldadas por el oficialista a href="http://es.wikipedia.org/wiki/Partido_Revolucionario_Institucional" rel="noopener noreferrer" Partido Revolucionario Institucional/a (PRI) y algunos del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), además de legisladores de grupos minoritarios.
El Congreso ha modificado parte de la propuesta original presentada por el presidente a href="http://www.infobae.com/personajes/enrique-pena-nieto-a80" rel="noopener noreferrer" Enrique Peña Nieto/a, que esperaba aumentar los ingresos tributarios en un 1,4% del producto interno bruto para el 2014. Con los cambios se estima que el porcentaje no será mayor a un 1% del PIB.
Entre lo avalado en el Senado se encuentra también un impuesto sobre la renta progresivo para quien gane más de 500.000 pesos (unos US$ 39.000 dólares) al año y que irá desde 31% hasta 35% según se incrementen los ingresos. Peña Nieto propuso un incremento general de 32% para ingresos superiores a 500.000 pesos al año.
En una medida no propuesta por el gobierno, los senadores avalaron -como los diputados- un impuesto de 5% a la comida "chatarra" y que aplicará para que aquellas golosinas o alimentos que tengan igual o más de 275 kilocalorías por cada 100 gramos.
También avanzó la propuesta oficial de gravar las bebidas azucaradas con un peso (US$ 7 centavos) por cada litro.
Carlos Riquelme, del Consejo Coordinador Empresarial en el estado fronterizo norteño de Chihuahua, dijo en Milenio televisión que el incremento a 16% de IVA en la frontera afectará a empresas como las maquiladoras y adelantó que se buscará hacer un frente para promover amparos e intentar detener su aplicación. "Tenemos que alzar la voz", dijo.
La presidencia del Senado convocó para la tarde de este miércoles a los legisladores para reanudar su sesión y en su caso aprobar lo que faltó, incluida la aplicación de 16% de IVA a alimentos para perros y gatos.
México es la segunda economía de América Latina, pero es uno de los países con las menores tasas de recaudación impositiva al estar apenas por encima de 10% del PIB.
El Congreso tiene hasta el último día de octubre para aprobar cualquier ajuste fiscal.