El cruel crimen del joven homosexual a href="https://www.infobae.com/" rel="noopener noreferrer" Daniel Zamudio/a, quien fue atacado a golpes por cuatro neonazis en marzo del año pasado y falleció tras 25 días de agonía, conmovió a todo Chile. Con la condena a cadena perpetua para Patricio Ahumada, asesino de Zamudio, y las penas de entre 7 y 15 años de prisión para los otros tres agresores, la Justicia cerró este lunes uno de los capítulos más crueles de la intolerancia hacia la diversidad sexual.
"Se condena al acusado Patricio Ahumada en calidad de autor de delito calificado de Daniel Zamudio a la pena de presidio perpetuo", dice la sentencia del Cuarto tribunal oral en lo penal de Santiago. El 17 de octubre pasado, el tribunal había declarado culpables a los cuatro condenados tras establecer su responsabilidad en el brutal ataque a Zamudio.
El fallo fue celebrado por el presidente chileno, Sebastián Piñera, quien repudió "el odio, la a href="http://www.infobae.com/temas/discriminacion-a1583" rel="noopener noreferrer" discriminación/a y la crueldad" que mostraron los asesinos de Zamudio. "Ese asesinato no podía quedar impune ni tampoco ser en vano", agregó. "Es una pena ejemplar, se van a pudrir en la cárcel", comentó, por su parte, Iván Zamudio, padre de la víctima, tras conocer la decisión judicial.
A Zamudio, de 24 años, le arrancaron parte de una oreja, le marcaron el cuerpo con esvásticas, le dejaron caer varias veces una gran piedra sobre el estómago y las piernas y le fracturaron una de ellas, además de quemarlo con cigarrillos, según el reporte del médico forense. La inhumanidad del ataque no solo mereció el mayor repudio en Chile y en el mundo entero, sino que sensibilizó a la sociedad y a los dirigentes del país, que apuraron en el Congreso una ley antidiscriminación.
No obstante, la situación de la comunidad homosexual en Chile es preocupante. Este mismo lunes, se dio a conocer públicamente otro hecho de violencia por discriminación en contra de Wladimir Sepúlveda, un gay de 21 años que fue atacado el 20 de octubre por cuatro hombres y dos mujeres en la localidad de San Franciso de Mostazal, en el centro de Chile, según informó el Movimiento de integración y Liberación Homosexual (Movilh). El joven sufrió un traumatismo craneoencefálico y permanece en coma y en estado crítico.
En respuesta, Piñera anunció una querella: "He pedido a los intendentes respectivos que presenten una querella criminal correspondiente por el caso de Wladimir Sepúlveda y también le hemos pedido al intendente de Antofagasta que se oponga a toda marcha cuya motivación sea el odio y la discriminación", sostuvo.