Flavio Mendoza y Romina Propato trabajaron juntos para crear el éxito teatral de Stravaganza, pero ahora están enfrentados y ella ni siquiera está yendo al teatro.
En una entrevista con Intrusos, Mariano Iúdica, el marido de la coreógrafa, dijo que "cuando Romina se dejó de divertir ahí adentro, dejó de ir. Dijo 'me voy a ocupar más de la casa, de los chicos. No me copa lo que pasa en el teatro' y empezó a no ir al teatro".
"Que hablen, que se llamen. Se dejaron de hablar. Tienen una relación de hace 20 años, se conocen de memoria. Es entendible que Flavio se haya puesto celoso, pero prescindir de Romina Propato porque estás celoso que Romina tiene una familia... No flaco, disfrutá, relajá".
Por su parte, en una entrevista anterior, Flavio había dicho: "Mi amiga es Romina, Mariano es su marido. Se quiere hacer prensa de algo cuando no hay necesidad".
Pero Iúdica siguió: "Para ir al teatro te tenés que sentir bien. Los apasionados siempre hacemos más de lo que nos pagan. No hay ningún reclamo, pero Romina es mil veces más que una coreógrafa en iStravaganza/i y yo quiero que mi mujer esté contenta cuando va a trabajar. Cuando le quitás presencia a alguien como Romina Propato, se nota y ella si no está bien, se va".
Más enojado aún, continuó: "Yo siento que él no lo puede manejar. Si la querés tanto, estimulala, que haya tenido que ir al teatro para hablar con Flavio, no sabés la lástima que me da".
Sin embargo, el conductor de Soñando por Cantar no se animó a confirmar si la dupla artística está terminada para siempre: "A lo mejor a Flavio no le interesa y se sacó un clavo de encima. Se piensa que soy yo el que la está influenciando. Alguien no lo está aconsejando bien a Flavio".