Treinta días sin clases se cumplen esta semana en Comodoro Rivadavia, luego de que la Regional Sur de la Asociación de Trabajadores de la Educación del Chubut (ATECh) lanzara un paro por tiempo indeterminado en reclamo de subas salariales acordes a los altos precios que se pagan en esa localidad petrolera.
Pese a que la semana pasada el gobierno de la provincia dictó la conciliación obligatoria, el sindicato conducido por Carlos Magno resolvió desoír la medida y continuar con su protesta, que afecta a unos 34 mil alumnos del distrito gobernado por el kirchnerista Néstor di Pierro.
"Al no encontrar una solución a esta altura del conflicto y que ninguna de las partes ha cedido hasta el momento, junto con el Concejo Deliberante hemos tomado la decisión de convocar tanto al Gobierno Provincial como a representantes de ATECh, donde el ejecutivo municipal y los concejales actuarán como garantía de diálogo", expresó este fin de semana el jefe comunal.
En tanto, el gobernador Martín Buzzi consideró que es "muy grave la pérdida de jornadas escolares, porque con cada día que pasa los alumnos están dejando de aprender cosas que les van a resultar importantes para la vida". "Si las aulas permanecen cerradas y no hacemos nada al respecto estamos hipotecando su futuro y el de toda la comunidad, al dejarlos sin herramientas", advirtió.
Los sindicalistas docentes que responden a la CTA de Pablo Micheli se niegan a bajarse de su medida hasta tanto les sea garantizado un aumento salarial. Según alegan, con los aumentos previstos para este año el sueldo de un maestro de grado llegará a $3.338 en septiembre y, con algunos ítems no remunerativos, alcanza los $4.200, cuando un alquiler en Comodoro Rivadavia no baja de $3.500 y la canasta familiar en esa localidad petrolera ronda los $14.400.