El papa Francisco recibió este jueves al presidente de Honduras, Porfirio Lobo, quien estuvo acompañando por una delegación de seis personas, entre ellas su esposa y dos hijos. El encuentro, que tuvo lugar en el Vaticano, duró 15 minutos y se desarrolló en forma privada.
El Sumo Pontífice recibió a sus invitados en la sala Tronetto y luego acompañó al presidente centroamericano a la biblioteca.
Después de la audiencia privada, en el momento del intercambio de regalos, el jefe de Estado hondureño le ofreció a su Santidad una imagen de la Virgen de Suyaba, muy venerada en su país.
Después de haber participado en la misa de Santa Marta, durante una breve ceremonia en los jardines vaticanos, la delegación hondureña donó una escultura de la Virgen de Suyaba de unos 200 kilos, en bronce.
Asimismo, concurrieron al acto de entrega los cardenales hondureño Oscar Rodríguez Madariaga y el italiano Giuseppe Bertello, según reportó la agencia Ansa.
"Esto -comentó el presidente durante la audiencia con el Papa- hará muy bien a Honduras y le dará ayuda espiritual".
En tanto, el Papa le regaló medallas de su pontificado y una copia de los documentos de Aparecida.
"Para un político es una llave. No digo que debe leerlo todo, pero al menos el índice", manifestó Francisco luego de hacerle entrega de esos documentos.