El destacado dirigente de los Hermanos Musulmanes egipcios y vicepresidente de su Partido Libertad y Justicia, Essam el-Erian, fue detenido por las fuerzas de seguridad en la operación que llevan a cabo en la localidad de Kerdasa, junto a El Cairo.
Según informaron fuentes policiales, el-Erian fue capturado cuando se hallaba escondido en esa ciudad, feudo de la Hermandad hasta el inicio del dispositivo el jueves de madrugada.
Las fuentes agregaron que, en el momento de su arresto, el-Erian y sus acompañantes estaban en posesión de armas automáticas y de granadas de mano.
Essam el-Erian era uno de los pocos líderes de los Hermanos Musulmanes que no habían sido detenidos hasta el momento por las autoridades egipcias tras la destitución del presidente islamista Mohamed Mursi en el golpe militar del pasado 3 de julio.
Precisamente, los islamistas egipcios, a través de la llamada Coalición para la Defensa de la Legitimidad, habían advertido que las "medidas de seguridad extremistas" agravarán la actual crisis y habían condenado el "estado de terrorismo y las amenazas" contra Kerdasa.
Durante la operación en Kerdasa han sido detenidas al menos 65 personas, entre ellas los tres principales acusados por el ataque del pasado mes de agosto contra la comisaría de la ciudad, en el que murieron once agentes.
Sobre Essam el- Erian pende una orden de detención por incitación al asesinato de manifestantes, con motivo de las masivas protestas populares contra el gobierno islamista de Mursi previas al golpe del pasado 3 de julio.
El dirigente era una de las caras públicas más conocidas de la Hermandad hasta su paso a la clandestinidad, y ha ejercido de vocero de la organización en muchos momentos de su historia reciente.