El anuncio llega tras un encuentro en París entre el presidente francés, François Hollande, con los ministros de Exteriores de los Estados Unidos y Gran Bretaña, John Kerry y William Hage.
Los tres países intentarán imponer su posición ante Rusia y China, los otros dos miembros permanentes del Consejo de Seguridad que son reacios a una política más dura contra el dictador Bashar al Assad.
Hollande, Kerry y Hage se reunieron dos días después de que Rusia y los Estados Unidos elaboraron un acuerdo sobre armas químicas, que podría evitar una acción militar estadounidense en Siria.
"Es esencial una resolución fuerte y vinculante" de la ONU sobre Siria, indicó la presidencia francesa en un comunicado. "Una resolución que prevea, por supuesto, consecuencias serias si no es aplicada", agregó el canciller francés, Laurent Fabius, en una conferencia de prensa dada en París junto con sus homólogos estadounidense y británico.
Para Hage, las autoridades sirias "están presionadas para que apliquen íntegramente ese acuerdo. El mundo debe estar dispuesto a sacar conclusiones si no lo hacen", afirmó Hague.
Kerry, por su parte, evocó también "consecuencias" si el presidente Al Assad "no aplica el acuerdo sobre las armas" químicas. "Haremos todo lo posible para ayudar al pueblo sirio a salir del caos y la violencia", agregó el secretario de Estado norteamericano.
Fabius anunció paralelamente la organización la semana próxima en Nueva York de una "gran reunión internacional" alrededor de la opositora Coalición Nacional Siria.
"Debemos hacer comprender al régimen que no hay más perspectiva que la mesa de negociaciones", y "para negociar una solución política se necesita una oposición fuerte".
"Contamos por ello reforzar nuestro apoyo a la Coalición Nacional Siria" y "con esa idea será organizada en Nueva York, con motivo de la Asamblea General de las Naciones Unidas, una gran reunión" con la organización opositora, añadió.
La resolución de la ONU que se discute el lunes detallaría cómo Siria puede asegurar y destruir su arsenal.
Kerry llegó a París tras un breve paso por Israel, donde se reunió con el primer ministro Benjamin Netanyahu.
Al mismo tiempo, hay expectativa por el informe que realizaron los inspectores de la ONU en la zona del ataque químico en las afueras de Damasco. El secretario general del organismo, Ban Ki-moon, ya ha adelantado que el texto ratifica que el 21 de agosto pasado ha habido un ataque con armas prohibidas contra la población civil.