La sobreestimación del crecimiento de la economía argentina se vuelve a instalar en la agenda tras la presentación del Presupuesto 2014. De la mano del ministro de Economía, Hernán Lorenzino, el Gobierno expuso en la Cámara de Diputados los principales supuestos macroeconómicos para el año que viene.
El Gobierno estimó que el Producto Bruto Interno (PBI) crecerá un 6,2% en 2014, con una suba del 5,7% en el consumo total y del 8,5% en las inversiones. Así, el cálculo del Gobierno casi triplica el crecimiento estimado por los privados. Los bancos y las consultoras argentinas proyectan una suba promedio del PBI del 2,2% para el mismo período, según la publicación Latin American Consensus Forecast.
Bulltick Capital Markets proyecta el crecimiento más alto, con una estimación del 4% para 2014, mientras que Fiel y ACM son los menos optimistas, con un 0,9% y 0,5% respectivamente. Sin embargo, ninguno de los cálculos supera la estimación oficial.
La proyección privada del PBI es más baja porque evalúan una suba del 2,4% en el consumo, mucho menor que la anunciada en el Presupuesto. Además, las consultoras estiman que la inversión bruta fija crecerá un 1,7 por ciento. "Los datos oficiales son recibidos con escepticismo por parte de los observadores", destacó el informe publicado.
Maximiliano Castillo Carrillo, socio de la consultora ACM, dijo que las "perspectivas macroeconómicas se encuentran alejadas de un escenario razonable", y el Presupuesto deja en evidencia que no habrá cambios sustanciales en la política económica.
El promedio calculado por Latin Consensus indica que la economía crecerá un 3,3% durante 2013, también menor del que proyecta el Gobierno, que se ubicaría en un 5,1 por ciento.
La suba del PBI no es la única variable sobreestimada por el Presupuesto, sino que la balanza comercial también entra en juego. Si bien Gobierno y privados no dudan del superávit en el comercio, los escenarios son muy distintos.
El Gobierno informó un superávit comercial mayor de u$s10.000 millones, con exportaciones que mejorarán 9,2% (u$s94.034 millones) e importaciones que subirán 8,6 por ciento (u$s83.910 millones). "Nuestras proyecciones están muy lejos" aseguró a Infobae Mauricio Claverí, especialista en comercio exterior de abeceb.com.
Las perspectivas de la cosecha agrícola y las ventas externas de autos –especialmente hacia Brasil– son más moderadas, y la consultora proyecta un saldo comercial de u$s8.500 millones para 2013. "La exportación de autos creció a más del 30% en los primeros siete meses, pero en agosto hubo una caída del 20% en las ventas a Brasil", aseguró Claverí. No hay que olvidar que ocho de cada 10 autos que se exportan van al país vecino.
En cambio, el superávit para 2014 se proyecta en u$s6.250 millones, un 38% menor que el estimado por el Gobierno. Para el especialista, "no es razonable" que las exportaciones aumenten un 8% el año próximo, como dice el Presupuesto. "No habrá empujes de precios, y los principales granos ajustarían a la baja. Además, Brasil tiene un crecimiento bajo y no traccionará mucho", agregó.
También estiman un déficit energético en u$s10.000 millones para el próximo año, por una caída fuerte de exportaciones y aumento de las importaciones.
En declaraciones a Infobae, el economista Orlando Ferreres reiteró que no usa los datos de la ley de leyes porque "no son reales". El Gobierno mantiene una vieja práctica de subestimar el gasto y los recursos. Naturalmente, como la inflación es más alta se recauda más, y luego, amparado en la Ley de Emergencia Económica, reasigna partidas discrecionalmente a través de Decisiones Administrativas del Jefe de Gabinete", explicó.
Tras la presentación de ayer en la Cámara baja, el Gobierno busca apurar los tiempos para que el Presupuesto llegue al Senado lo antes posible, y así poder aprobar la ley antes de las elecciones legislativas de octubre.