Brasil tiene un "colchón de seguridad y liquidez" que se puede inyectar a "diversos segmentos del mercado" para evitar una mayor volatilidad cambiaria, dijo este sábado el presidente del Banco Central, Alexandre Tombini.
"Usaremos nuestro amplio paquete de instrumentos para reducir la volatilidad excesiva y mitigar potenciales riesgos a la estabilidad financiera", dijo Tombini, citado por la estatal Agencia Brasil.
El presidente del Central explicó en un congreso en la ciudad de Campos do Jordão, en el estado de San Pablo, que en los últimos dos años el país amplió el "colchón de seguridad y de liquidez".
"Adicionamos casi US$ 90.000 millones a nuestras reservas internacionales, que hoy sobrepasaron los US$ 370.000 millones", explicó.
El "colchón" permite en el actual "período de transición, marcado por niveles más elevados de volatilidad y por el aumento de la aversión al riesgo, ofertar protección (hedge) a los agentes económicos y, de ser necesario, liquidez a los diversos segmentos del mercado", indicó.
El Banco Central anunció hace una semana que intervendría en el mercado con 60.000 millones de dólares hasta fin de año para apoyar al real, hundido en su mínimo desde 2009. La desvalorización de la moneda local, de más de un 16% desde mayo, ha causado preocupación por su impacto sobre la inflación y el endeudamiento de las empresas locales.
La moneda brasileña llegó a cotizarse la semana pasada a 2,45 por dólar, su menor valor desde diciembre de 2008.