Por primera vez, los argentinos ya tienen su propio índice de salud y bienestar

¿Qué es lo que contribuye a la sensación de salud y bienestar de los argentinos? ¿Cuánto dormimos? ¿Cuál es la primera opción de los argentinos para perder peso? ¿Al buscar información de salud, consultamos al médico o lo googleamos? ¿En qué y cuánto influye la tecnología en nuestra vida cotidiana?

Con estas preguntas marco se presentó el primer índice de salud y bienestar con acento argentino, impulsado y financiado a nivel global por la empresa Philips. Se trata de un estudio global de percepción que se realiza en todo el mundo desde el año 2010 en más de 20 países del mundo; siendo este el primer año que se realiza en la Argentina.

El índice de salud y bienestar en Argentina para el 2013 es de 53, que en una escala de 1 a 100 no está mal y en el contexto internacional

se ubica levemente por debajo del promedio global al igual que su par sudamericano Brasil con 54.

Los países  que ocupan el top tres con los mejores índices son los Emiratos Árabes, con 88; Arabia Saudita, con 78, e India con 72.  La primera sorpresa que reflejan los números, es que las cifras  no expresan el nivel real de salud y bienestar de estos países sino la sensación de salud y bienestar que los encuestados han declarado. Y que muchas veces difiere brutalmente con los datos objetivos de la realidad que los circunda.

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, puntualiza Gustavo Verna CEO de Philips en el cono Sur.

¿Cómo se calcula el  índice de salud y bienestar? Este índice mide la satisfacción global según varios componentes de salud y bienestar cruzados por su importancia relativa.  En lugar de preguntar simplemente cómo se siente el encuestado, el índice considera 17 componentes relacionados a la salud y al bienestar. La constelación de temas son: trabajo, comunidad, salud física, salud emocional y amigos y familia.

El primer paso entonces para llegar a la cifra es evaluar la importancia de una serie de factores. Y el segundo paso para construir el índice es evaluar la satisfacción de esos mismos factores, ya que la diferencia entre una y otra, marca la sensación de bienestar que tienen los encuestados. El dato más llamativo es el costo de vida, ya que es uno de los factores más importantes pero que al mismo tiempo genera  la menor satisfacción.

En el caso argentino, se observa que la mayor fortaleza está en la familia y amigos (76), seguido por la salud física (65) y salud emocional (56). En cambio, el trabajo (32) y las cuestiones relativas a la comunidad (45) aparecen como debilidades relativas. Esto se debe en gran parte, a la insatisfacción que generan los factores económicos.

Según el estudio, la salud física de los miembros de la familia es lo que más impacta sobre la sensación de salud y bienestar de los argentinos; el 68% de la gente afirmó que existe una relación entre estos aspectos. Además, el 66% señaló que pasar tiempo con sus seres queridos ayuda a incrementar su sensación de bienestar. Según los datos, estos factores tienen mucha más injerencia que otros tales como el rendimiento en el trabajo (sólo el 38% lo juzgó trascendente) y la relación con jefes y colegas (apenas el 28% le atribuyó relevancia).

A nivel global, la importancia otorgada por los argentinos a pasar tiempo con los seres queridos como modo de incrementar la sensación de bienestar se compara con valores hallados en Brasil (68%), Francia (64%) y Holanda (64%), aunque está lejos de los resultados de países como Alemania y Portugal, donde más del 90% de la población se manifestó en ese sentido. Los porcentajes más bajos se registraron en Australia (39%) y Corea (28%).

El 93% de los encuestados indicaron que su salud dependía de sí mismos; sin embargo, estas respuestas no se condicen con los hábitos declarados. El 35% confesó ir al médico para un chequeo general menos de una vez al año, la periodicidad habitualmente recomendada para una revisión.

Además, cerca de la mitad admitió hacer actividad física menos de una vez al mes y el 40% consideró tener sobrepeso. Estos factores van en detrimento del estado de bienestar ya que una calidad de vida óptima requiere una alimentación saludable, chequeos médicos habituales y actividad física regular.

Al ser consultados sobre la primera fuente a la que recurren cuando están preocupados por su salud, los argentinos destacaron a los médicos (59%), seguidos –de lejos- por familiares y amigos (30%).

Contrariamente a lo que podría creerse, sólo el 3% mencionó a internet como la referencia en estos casos, a diferencia de lo que sucede en países como Japón o Suecia, en los que más del 40% de la población señaló a la web como primera fuente de consulta.

Respecto de los datos sobre sueño, Diego Golombek, Doctor en Ciencias Biológicas (UBA), profesor titular de la Universidad Nacional de Quilmes e investigador principal del Conicet, alerta sobre la subvaloración que tiene el tema  trastornos del sueño entre los argentinos:  "La calidad del sueño de los argentinos es muy mala y provoca trastornos de salud y sociales muy importantes. Los argentinos duermen poco, y sufren serios trastornos del sueño, lo que ocurre es que pocos consultan al especialista. Inclusive la cifra que arroja el índice tal vez esté subvaluada, porque el problema es mayor".

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s".  Hay que entender que el trastorno del sueño es una enfermedad que afecta todo el resto de la salud . hay que trabajar en la higiene del sueño, refuerza Golombek.

Cerca de la mitad de los argentinos (47%) confía en que vivirá más años que sus padres, el 28% cree que vivirá el mismo tiempo y sólo el 4% piensa que vivirá menos. Esta mirada positiva sobre la esperanza de vida es similar a la registrada en Dinamarca, Estados Unidos o España, donde los porcentajes de personas confiadas en vivir más años que sus progenitores también alcanzó valores de 46% y 47%. Los números más bajos se registraron en Egipto (sólo el 11% se mostró confiado en superar el tiempo de vida de sus padres), Turquía (14%) y Japón (16%).

El estudio también indica que los argentinos confían en el impacto positivo que la tecnología médica tendrá sobre sus vidas: un 70% cree que para cuando llegue a una edad que implique graves problemas de salud, la tecnología médica habrá avanzado tanto que dichos problemas no lo afectarán. En esta línea, la población consideró que dos de los aspectos en los que la vida fue positivamente transformada por la tecnología fueron el del diagnóstico y el del tratamiento médico (88% y 86% respectivamente).

Según el estudio, el 44% de la población está algo, bastante o muy estresada. Entre los factores que influyen sobre esa sensación se destacan los de índole económica: más del 70% afirmó verse afectado por la preocupación de tener suficiente dinero para pagar las facturas (72%) y para ahorrar para el futuro (65%), mientras que el 69% afirmó que el estrés que siente tiene que ver con "la economía". El valor de este último indicador dobla el registrado en países como Suecia (35%), Japón (35%) o Brasil (36%).

En esta línea, los atributos en los que se registraron mayores diferencias entre importancia y grado de satisfacción tuvieron que ver con lo económico: el 74% afirmó que su nivel de ingreso es importante pero sólo el 54% se mostró satisfecho con el mismo, mientras que el costo de vida fue considerado relevante por el 92% y sólo el 37% se mostró conforme.

Otro de los factores que influye sobre el estrés de los argentinos es la inseguridad: más de la mitad (56%) afirmó verse afectado por la posibilidad de ser víctima de un crimen. Además, al ser consultados sobre las cuestiones relevantes al momento de elegir una ciudad para vivir, la población atribuyó gran importancia a la seguridad (94%). Los otros aspectos destacados fueron la cercanía a hospitales (96%), la recolección de residuos (95%) y el acceso a facilidades sanitarias (94%).

El estudio fue elaborado a partir de una encuesta realizada por la consultora IPSOS a 1200 hombres y mujeres de entre 18 y 70 años de todo el país, durante marzo y abril de 2013.

1-• El 77% de los encuestados califica de manera positiva su estado de salud. Lo que más afecta su sensación de salud y bienestar es lo relativo a su familia: su salud física, la buena relación que puedan tener y el tiempo que pueda pasar con ella.      

2-• El 40% de los encuestados consideran tener sobrepeso. Las dos principales medidas que implementan los argentinos al respecto para bajar de peso son:  hacer ejercicio y hacer dieta. Un 53% declara hacer ejercicio al menos una vez al mes, mientras que hay un 32% que dice no hacer nunca ejercicio.

3-• El 25% no duerme bien por las noches. Esto afecta principalmente su salud física y la vida familiar.

4-• El 44% dice estar estresado en alguna medida. Las razones principales son de tipo económicas como no tener dinero para pagar las cuentas, no tener dinero para ahorrar, etc.

6-• Se observa un impacto positivo de la tecnología en la vida de las personas. La mayoría considera que la tecnología ha mejorado distintos aspectos de su vida.

7-• La mayoría quiere saber si va a tener una enfermedad terminal antes de que suceda. El papel de la tecnología aquí es clave, ya que hay alta predisposición a que ella ayude a saber esto con anticipación.