Luego de haber ingresado cinco veces a un centro de rehabilitación y a días de entrar nuevamente en una institución para recuperarse, Lindsay Lohan se sinceró durante una entrevista con la conductora Oprah Winfrey.
"A pesar de sentirme feliz con todo el caos que me rodeaba, inconscientemente quería ir a prisión y así encontrar algo de paz", reconoció Lohan, quien reveló que probó varias cosas en los últimos años: "Mi adicción al alcohol fue la puerta de entrada a otras sustancias".
"Sí, soy adicta. Tomé cocaína, al menos en 10 o 15 ocasiones", confesó Lindsay, aunque destacó que, afortunadamente, no le gustaba demasiado esa droga y sólo se dejaba llevar en las fiestas.
Sobre su nuevo ingreso a un centro de rehabilitación, la actriz de 27 años comentó: "Creo que otras veces no acepté el hecho de que lo único que debía hacer era cerrar la boca y escuchar".