El famoso boliche Junior pasó a ser sólo un recuerdo de aquellos que lo frecuentaron durante sus años de existencia, en la década del 90, ya que todo lo que quedaba de él era su estructura, que fue demolida hoy, por decisión del gobierno de la Ciudad.
Situado en la esquina de la avenida Figueroa Alcorta y Leopoldo Basavilbaso, el edificio donde cientos de jóvenes vivieron noches de diversión en épocas del menemismo había sido expropiado por el Gobierno porteño para cumplir con la promesa que responde a "viejos y justificados reclamos de los vecinos", hacer una plaza y devolver a la ciudadanía "2200 m2 de espacio verde".
"Histórico momento para los vecinos del boliche Junior de Núñez. Lo estamos demoliendo", anunció esta mañana Santilli en su cuenta de Twitter. Y avisó que los trabajos continuarán.
En un comunicado, el funcionario recordó que el predio "por su abandono, era un peligro para todos los vecinos de la zona. Dependimos de los tiempos de la Justicia, pero lo importante es que acá se recuperarán 2.200 metros cuadrados de espacios verdes".
El boliche dejó de funcionar como tal en enero de 2000, y había sido cercado hasta que comenzaran los trabajos a cargo del gobierno porteño. El predio cercano a la cancha de River tiene 3.650 metros cuadrados y estuvo abando varios años.
En contraposición al éxito efímero que tuvo el lugar, al que asistían reconocidas modelos y deportistas, los vecinos siempre se opusieron y pidieron su clausura por irregularidades y ruidos molestos. Reclamaron incansablemente que les devuelvan el lugar y que se utilice para fines sociales y culturales.
En 2010, el gobierno porteño instruyó a la Procuración General para que permita demoler el sitio, que pertenecía a pesar de que pertenecía a capitales privados fue expropiado por la Ciudad.