Pasaron tres años de aquel grito sagrado que desgarró el alma de los españoles. Tres años del gol de Andrés Iniesta en el minuto 116 de la prórroga que decretó el título de campeón del mundo. Hace tres años, dirigida por Vicente Del Bosque, España cumplió su gran sueño en tierra africana.
El camino empezó el 16 de junio, en la ciudad de Durban, donde Suiza dejo tambaleando las ilusiones de la Roja tras imponerse 1-0. Una sorpresiva caída había impactado en el grupo español, pero ante Honduras y Chile estaba la gran chance de revertir la situación de cara a la segunda ronda.
David Villa marcó un doblete para vencer 2-0 a los hondureños. Y en Pretoria, un triunfo 2-1 ante el Chile de Marcelo Bielsa aseguró el pase a los octavos de final. Villa volvió a marcar para abrir la historia e Iniesta estiró la ventaja con clase.
Villa había dado muestras de su clase goleadora en la fase de grupos y se convirtió en el hombre clave para meter a España entre los cuatro mejores del Mundial. Marcó el 1-0 triunfal ante Portugal en Ciudad del Cabo. Y en cuartos, marcó ante Paraguay en Johannesburgo el único grito de una noche difícil para su equipo.
Todos abrazan a David Villa frente a Paraguay
En semifinales, otro triunfo por la mínima diferencia. Esta vez, frente a Alemania ¿El héroe? Carles Puyol, quien anotó de cabeza en el minuto 27 de la segunda parte. Sólo quedaba un paso: derrotar a Holanda en la final. El 11 de julio de 2010, jamás se borrará en las retinas de los españoles.