El empresario Lázaro Báez realizó una rueda de prensa en su chacra de Río Gallegos e invitó a la prensa a recorrer los más de 300 metros cuadrados. Allí, el santacruceño trató de desmentir una reciente denuncia de la diputada de la Coalición Cívica-ARI Elisa Carrió sobre el presunto desmantelamiento de una bóveda con dinero, documentación y armas, escondidos en esa finca.
El empresario aseguró que la bóveda secreta de la que hablan nunca existió y fustigó a quienes realizaron la denuncia. Ayer, la legisladora denunció ante el fiscal federal Guillermo Marijuán que Báez supuestamente desmanteló una bóveda en una vivienda de su propiedad en Río Gallegos.
Según la denuncia, de allí se habría llevado -según Carrió- dinero, documentación y media docena de armas largas con destino a otra estancia ubicada en el interior de la provincia de Santa Cruz.
En ese mismo escrito, la diputada pidió a Marijuán que le brinde protección al técnico que presuntamente desarmó la bóveda en la chacra número 39, ubicada en la calle Nicolás Giglio y Walter Roy, al tiempo que solicitó el allanamiento de esa finca y de la estancia "Laquinta", ubicada en la Ruta Nacional 40 que va a Río Turbio, a unos 100 kilómetros de Río Gallegos.
Carrió pidió especialmente protección frente a la posibilidad de "riesgo de vida" para un empleado de la firma Austral Construcciones llamado Sergio Triviño, quien habría participado de los trabajos de desmantelamiento e incluso tomado fotografías del proceso.
La propia legisladora nacional entregó a la Justicia material fotográfico, registrado supuestamente por Triviño, acompañando su denuncia e indicó que ese desmantelamiento se produjo apenas horas después de que el periodista Jorge Lanata comenzara un nuevo ciclo de su programa "Periodismo para todos", el domingo 14 de abril pasado.
Esa noche, Lanata mostró por televisión un informe en el que, mediante presuntas cámaras ocultas y entrevistas con "arrepentidos", se brindaron detalles sobre supuestas maniobras de lavado de dinero por más de 55 millones de euros, con Báez en el centro de la acusación.
En este contexto, anoche el empresario invitó a los medios de comunicación de la provincia y a los corresponsales de otros diarios allí presentes, a recorrer la casa para comprobar que en ese lugar no existe, ni existió ninguna bóveda secreta.