Dirigentes del sector industrial anunciaron que plantearán al gobierno medidas para combatir el contrabando de productos argentinos y anticiparon que pedirán un cierre de frontera para evitar su ingreso.
El peso ha bajado considerablemente su cotización respecto a la moneda paraguaya: de más de 1.000 guaraníes que costaba cada unidad, actualmente se encuentra en poco más de 500 guaraníes.
Esta situación hace que miles de paraguayos crucen la frontera a ciudades argentinas, entre las que se encuentra Clorinda, frente a Asunción, para conseguir productos a veces muy por debajo de los que cuestan en los supermercados asuncenos.
La Unión Industrial Paraguaya (UIP) solicitó una urgente reunión con el gobierno y no descartaban que entre sus pedidos figure el cierre de la frontera con Argentina al ingreso de los productos de ese origen.
El titular de la UIP, Eduardo Felippo, citó como ejemplo que el Uruguay adoptó una medida de esa naturaleza, y sostuvo que "es solo cuestión de ordenar" para que el gobierno paraguayo adopte también una decisión similar.
Según el citado dirigente, tanto las empresas industriales locales como los supermercados tuvieron una merma de al menos 15% en la venta de los productos debido al masivo contrabando desde el vecino país.
Felippo mencionó que la gente que va a traer los productos argentinos en vehículo propio, también aprovechan para llenar sus tanques con combustibles que también tienen precios más bajos.
Independientemente del contrabando, existe un régimen legal "de pacotilla" que permite a los paraguayos adquirir productos en localidades fronterizas argentinas hasta el equivalente a 150 dólares estadounidenses, que es aprovechado al máximo actualmente, señaló el dirigente industrial.