El anuncio de que Alfredo Di Stefano, presidente de honor del Real Madrid, se iba a casar con su novia costarricense y secretaria en el club merengue, Gina González, sorprendió al mundo. Los hijos del mítico goleador irán a la justicia para impedir el matrimonio.
"La Saeta Rubia" tiene 86 años y su pareja 36. La diferencia es de 50 años. El ex futbolista argentino ya había prevenido una posible negativa de sus hijos: "Deben estar en contra. Pero a mí eso no me importa. A mí me interesa mi vida y nada más. Y no armar mucho lío."
Y finalmente, como él esperaba, cinco de los seis hijos (Nannette Norma falleció a los 60 años en diciembre pasado) que son producto del matrimonio con la ya difunta Sara Freites Varela, emitieron un comunicado para mostrar su disconformidad y recurrirán a los tribunales para que su padre no se case.
El petitorio explica que la negativa se hace "ante el deterioro evidente de las facultades físicas e intelectivas que se viene observando en nuestro padre desde hace meses", y que la decisión de los cinco se tomó con "previo diagnóstico médico de su estado de salud".
"Solicitamos ante los Juzgados competentes, y en su exclusivo interés, su declaración de incapacidad, promoviendo de forma simultánea la adopción de medidas cautelares, en orden a la preservación de su patrimonio", argumenta el mensaje de la familia de Di Stefano.
Las partes serán citadas. Mientras, los hijos de Don Alfredo se basan en "su actual estado de vulnerabilidad, y su proyección mediática" para evitar "conductas abusivas sobre su persona".