Otra señal habría anticipado la llegada de Jorge Mario Bergoglio a la Santa Sede. A la gaviota "argenta" que se posó en el Vaticano durante el cónclave, los números de la quiniela, y del sueño clarividente que se viralizó a través de las redes sociales, se le sumaron una serie de profecías del "Nostradamus argentino", Benjamín Solari Parravicini. En varios dibujos que produjo en vida, el artista predijo en cierta manera la sorprendente designación de Francisco.
Pintor y escultor, Parrivicini se hizo famoso a partir de vaticinios que agrupó en una serie de dibujos, a los que llamó psicografías. Con su producción, profetizó importantes hechos sobre el futuro de Argentina y el mundo.
El artista comenzó a tener visiones en 1936. Decía que sus manos, fuera de control, dibujaban y escribían premoniciones. Los vaticinios seguían un formato: una imagen continuada por un mensaje a modo de explicación. En su conjunto, produjo casi un millar de dibujos que se fueron cumpliendo con mucha certeza.
En el caso del Sumo Pontífice argentino (ver galería), hay una inscripción de 1940 que sostiene: "Crisol de razas. ARGENTINA. Cristo REX. Nuevas corrientes de sangre feliz". El "Cristo REX" proviene del latín, donde la mención hacia un rey probablemente se refiera a quien gobierna monárquicamente la Iglesia Católica.
Otra visión, de 1942, que apunta en esta dirección augura sobre "las playas" de nuestro país, donde aparecerá el "pescador" que maneje la barca de Pedro, fundador del catolicismo como institución. Allí, se sostiene: "Caminante tu que observas, ve hacia a la playa de las arenas argentadas, allí aguarda la paz. ¡Faro de Faros!".
En tanto, en 1972 anticipó: "Nueva era llega! Mundo en disfraz. Mascarada perenne. La iglesia entregará su otorgamiento a la renunciación del Papado y el nuevo será
joven de ideas". Aquí parece predecir que luego de la renuncia de un Papa (Benedicto XVI), hecho poco común que sucedió luego de 600 años, sería elegido otro que renovará las ideas del catolicismo. Bergoglio, jesuita y admirador de San Francisco de Asís, parece ajustarse sin dudas a esta caracterización.
Además, Parravicini produjo una serie de dibujos que se ajustan con la coyuntura actual de la Iglesia. En 1939 escribió: "Llegará el día en que el Santo Padre llamará a sus sacerdotes para hacerles razonar mas todo será inútil, la iglesia será caída en ceguera y despotismo". La descripción parece augurar cuando Benedicto XVI trató de hacer entrar en razón a sus sacerdotes por los escándalos sexuales y de corrupción que sacuden a la Iglesia, y que al no poder controlarlos decidió abdicar en su cargo.
"La Iglesia equivocará sus pasos y sus mismos dirigentes la falsearán", sostiene otro escrito, mientras que una imagen de 1939 apunta: "¡Iglesia Meditad! vuestros claustros curad".
Parravicini se refiere también a dos Papas en sus predicciones. En 1972 escribió, debajo de una psicografía donde se ven dos Papas superpuestos: "PAPA NUEVO. QUE? à Divergencias. El NUEVO PAPA será luego de arduas luchas internas. Dos luces diferentes, dos verdades, dos problemas. Avanzará el confucionismo y de ello surgirá lo inesperado."
Aquí, la mención también parece apuntar a la realidad. La renuncia histórica de Benedicto XVI y su anunciado retiro del mundo en un convento en los jardines del Vaticano representa una inédita convivencia entre dos pontífices de la Iglesia católica, ya que Francisco I se sentará en el trono de Pedro, pero Benedicto XVI seguirá siendo Papa emérito en el Vaticano.
La historia del pintor clarividente
Según su relato, Solari Parravicini realizó bajo el mandato de su ángel de la guarda, llamado José de Aragón y otras personalidades incorpóreas, más de mil dibujos proféticos (que él llamaba psicografías premonitorias) realizadas a lo largo de su vida entre los años 1936 y 1972.
En 1938, el pintor despertó sintiendo un fuerte olor a mar y algas, y empezó a escuchar una voz de mujer que le decía que ella se estaba separando de la vida mientras las algas cubrían sus manos. Al final, la mujer se identificó como "Alfonsina Storni, Mar del Plata, octubre de 1938". En ese instante, a 500 kilómetros de donde él se encontraba, se suicidaba la poetisa en el mar.