Las autoridades allanaron este martes una extensa hacienda en Oklahoma y un prominente hipódromo en Nuevo México que el hermano de un líder de un cártel mexicano usó en una operación de crianza hípica para lavar dinero.
Un acta acusatoria abierta el martes alega que Miguel Angel Treviño Morales, una figura clave en la operación de los Zetas, puso en marcha una operación hípica que era dirigida por un hermano menor desde una hacienda cercana a Lexington, al sur de Oklahoma City. Millones de dólares circularon en la maniobra, que compró, entrenó, crió y corrió caballos de cuarto de milla a lo largo del suroeste de los Estados Unidos, incluyendo la famosa pista Ruidoso Downs en Nuevo México.
"Este caso es un claro ejemplo de la habilidad de los cárteles de la droga mexicanos para introducirse en industrias estadounidenses legales y subraya la seria amenaza que causa el lavado de dinero a nuestro sistema financiero", sostuvo Richard Weber, jefe de la unidad de investigación delictiva del Servicio de Rentas Internas (IRS, por sus siglas en inglés).
Siete de las 14 personas acusadas fueron arrestadas, entre ellas José Treviño Morales, que operaba la compañía de crianza de caballos Tremor Enterprises, y su esposa, Zulema. Otro hermano de Treviño también fue acusado. La fiscalía pidió que la corte no fijara una fianza ante el temor de que pueda huir o intimidar a los testigos. El sospechoso se negó a declarar ante la corte.
La maniobra "legal"
La acusación describe la manera en que los hermanos Treviño y una red logró discretamente comprar caballos cuartos de milla en subastas con dinero proveniente del narcotráfico y ocultar el origen de los fondos a fin de que la participación de Los Zetas se mantuviera en secreto. Por lo general pagaban en efectivo o usaban nombres falsos, lo que les ayudó a mantener en secreto a los propietarios y el dinero.
Desde 2008, la operación acumuló millones de dólares en transacciones en Nuevo México, Oklahoma, California y Texas, de acuerdo con los fiscales.
Tremor Enterprises empezó pequeña, pero actuó a plena vista. Los nombres de algunos caballos hacen referencia al narcotráfico, como Coronita Cartel. Con el tiempo, los animales y la operación se ganaron un lugar en algunas de las plazas de mayor prestigio del hipismo. Un caballo nombrado Mr. Piloto ganó una bolsa de un millón de dólares en Ruidoso Downs el Día del Trabajo; otro llamado Tempting Dash venció en la carrera Dash for Cash en el hipódromo Lone Star Park en Grand Prairie, Texas.
Redadas
El diario New York Times) fue el primero en reportar en su página de internet las redadas y la supuesta conexión del cártel mexicano de los Zetas, mencionando una investigación de meses y varias fuentes anónimas.
Los Zetas son uno de los dos cárteles de la droga más poderosos de México y tiene la reputación de ser el más despiadado y dispuesto a cometer atrocidades. El cártel fue responsabilizado de la masacre de 2010 de 72 migrantes centroamericanos en el estado mexicano de Tamaulipas, limítrofe con Texas. También se le culpa de haber arrojado 49 cadáveres mutilados en una carretera del estado de Nuevo León y una serie de asesinatos de personas en grupos reducidos. Además, es acusado de destinar millones de dólares a políticos y funcionarios de agencias del orden en Tamaulipas, en un caso que actualmente es investigado por las autoridades federales de los Estados Unidos.
Durante las redadas del martes, decenas de agentes del FBI vestidos con chalecos antibalas allanaron la pista para cumplir órdenes de arresto y recolectar evidencia. Al menos dos caballos fueron decomisados.
El Gobierno federal busca la incautación de varios caballos, afirmando que fueron usados para favorecer delitos. Entre ellos se encuentra Mr. Piloto.
También se realizó un cateo en la hacienda ubicada a unos 65 kilómetros al sur de Oklahoma City. Al menos media decena de agentes con vestimenta camuflada y gorras de béisbol con las siglas del FBI seguían en la estancia al empezar la tarde, pero se negaron a hacer declaraciones.
Una figura reputada
La directora de la Asociación de Carreras de Caballos de Cuarto de Milla de Oklahoma, Debbie Schauf, afirmó que José Treviño se presentó hace un par de años y rápidamente se ganó la reputación de siempre cubrir sus cuentas y pagar grandes sumas por varios de los mejores caballos del país.
"También eran conocidos por cuidar sus negocios. Pagaban sus cuentas y no causaban ningún problema. Uno nunca recibía la llamada de un vendedor de comida o un veterinario quejándose de que no podían contactarlos para que pagaran sus cuentas. Eran buenos ciudadanos en la industria hípica", comentó. Debbie Schauf.
Schauf agregó que resultaba común que los compradores foráneos pagasen en efectivo por los caballos, pero que varias transacciones llamaron la atención por su valor. E indicó: "No sorprendió cuando estas personas llegaron a los lugares de venta y empezasen a pagar en efectivo. Lo que sorprendió fue la calidad de los caballos que estaban comprando y la cantidad de dinero que cuestan esas yeguas".