La historia del enfrentamiento entre el presidente Cantero y la "Barra" de Independiente

Ya antes de asumir, el actual mandatario de Independiente había adelantado que sacaría a los violentos del club. Con un solo error -admitido públicamente- en el camino (comprarles una bandera), cumplió su palabra. Ahora los delincuentes quieren recuperar el terreno perdido. REPASÁ TODA LA HISTORIA DEL CONFLICTO ENTRE CANTERO Y LA BARRA

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Es relativamente sencilla y corta la historia del enfrentamiento entre Javier Cantero y la barrabrava. Cuando todavía no era Presidente y competía en campaña contra la lista de Julio Comparada, encabezó la movida de hinchas verdaderos que eligieron ir a la tribuna de enfrente, cuando los violentos habían provocado la renuncia de Antonio Mohamed, copando la antesala del vestuario, con la complicidad de los dirigentes de aquel entonces.

¿Resultado? Los delincuentes se cruzaron toda la cancha, vestidos con las camperas oficiales del club y con cuchillos amenazaron, y disiparon al grupo (fundamentalmente familias) de personas que estaba cantando a viva voz contra ellos ¿Qué decían? La verdad, que lucraban con Independiente y que el club sólo les interesaba como "fuente de recursos".

En la elección, la barra apoyó a la lista de Álvarez (sostenido por Comparada) y perdieron. Apenas asumió Cantero, les "cortó los víveres" y los violentos aprovecharon el partido del verano contra San Lorenzo en Mar del Plata para insultarlo y amenazarlo públicamente.

Luego, Cantero cometió el error de comprarle una bandera a la barra y éstos, lo denunciaron públicamente. El Presidente asumió la culpa y prometió no volver a hacerlo. Ahora, como los resultados del equipo son buenos y la gestión cristalina, la barra no tiene de dónde agarrarse para hostigar a Cantero y eligieron exigirle la renuncia del Gerente (Rafaelle Ruttigliano), repartiendo volantes con la fotocopia de su recibo de sueldo.

Los repartieron en la cancha, en el partido ante Banfield y se retiraron de la tribuna dejando un hueco. Como nadie les prestó atención, anoche fueron (solos) a reclamar en la puerta de la sede. Tampoco nadie (los hinchas de verdad) los siguió. Así llegamos a hoy, cuando decidieron entrar a la sede por la fuerza a amenzar al Presidente. Todo porque no les deja guardar las banderas y los bombos en la cancha. O al menos eso dicen los barras.

La verdad es que se cortaron las entradas, los micros, el dinero en efectivo, la ropa oficial y todos los demás "beneficios" que los violentos tenían en la gestión anterior.

Esta historia continuará, ojalá que ganen los buenos...



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