El día en que Ucrania vio sin trenza a Timoshenko

En 2002, cuando ya había incursionado en política, decidió desmentir ante las cámaras los rumores que dudaban de la autenticidad de su peinado. Vea las fotos

Yulia Timoshenko ha tenido muchos rostros. De empresaria, se convirtió en 2004 en líder de la revolución naranja, y más tarde consiguió ser primer ministra en dos ocasiones (en 2005 y de 2007 a 2010).

Como muestra de su evolución, su peinado también fue cambiando. De tener el pelo corto y negro pasó a ser identificada con una trenza rubia enroscada a modo de diadema que imita la forma de una espiga de trigo.

Su peinado es en realidad un homenaje al tradicional peinado de las campesinas ucranianas de mediados del siglo pasado. Al tiempo que era identificada por la trenza, algunos de sus adversarios dudaron de su autenticidad. Timoshenko no vaciló al respecto, y en una ocasión, durante una conferencia de prensa, se deshizo la trenza y a continuación se soltó el pelo. Por último lo peinó, para demostrar a todos que ella no llevaba ninguna peluca.

Del mismo modo que se transformó su peinado, también lo hizo su vestuario. Lejos del sobrio traje que solía vestir durante sus años de empresaria, en los últimos años los ucranianos se acostumbraron a verla con vestidos ajustados profusos en encajes y mangas amplias.

Entre 1º999 y 2001, el por entonces presidente Leonid Kuchma la nombró viceministra de combustibles en el ministerio de Energía, rama a la que ha estado ligada toda su vida profesional.. Diez años después, la política fue no sólo derrotada en sus intentos de convertirse en presidenta del país, sino que además ha sido condenada por abuso de poder por haber firmado en 2009 un polémico contrato de gas con Rusia que hizo perder dinero a una empresa estatal ucraniana.