El artista Stephen Sawyer es el hombre detrás de las ilustraciones que muestran a un Jesucristo ganador y con pectorales marcados.
Su proyecto Art4God busca acercar a los jóvenes a la religión, convencido de que "todos somos evangelistas de algo" y él ha elegido serlo "del hombre que vivió hace 2.000 años" y sigue siendo su "héroe".
En una de las fotos, por ejemplo, se lo puede ver con un tatuaje, una práctica que ya existía en la Antigüedad y que, en tiempos de Jesús, se usaba para identificar a los reos y relegados de la sociedad.
"Es una forma de explicar qué significa que Jesús viva dentro de ti", agregó el artista.
Sawyer aseguró, además, que no tiene idea de cómo se veía Cristo hace unos 2.000 años y que ni siquiera le importa. Lo que sí es importante para él es "crear una iconografía que sea relevante para hoy". El pintor vive en Kentucky, pero viaja por los Estados Unidos para alimentar el movimiento.
"Difícilmente hubieran podido narrarse escenas como el ataque de Jesús a los mercaderes del templo si el protagonista de la historia hubiera sido un debilucho. Era un carpintero de clase trabajadora, seguramente su cuerpo era fuerte y musculoso porque era su herramienta de trabajo", explicó el artista.
Con libros, revistas y blogs (como No More Mr Christian Nice Guy), Sawyer no está solo en su campaña: "Me alegra que se arme un movimiento alrededor de esto, la intención es dejar de lado nuestros prejuicios y aceptar las creencias de todos a partir de la tolerancia", expresó al autor.
Las imágenes han sido cuestionadas por grupos conservadores, que consideran que destacar el físico del líder del cristianismo deja relegado su aspecto espiritual. Sawyer se defiende: "Tenemos una mentalidad de cómic y no veo nada de malo en aplicar eso a la religión. Ni siquiera creo que esté haciendo algo realmente nuevo", aseveró.