Un héroe de Malvinas que fue homenajeado hasta por los británicos

Carlos Robacio estuvo a cargo del Batallón de Infantería de Marina que continuó combatiendo en las Islas aún después de que la Argentina se rindiera. Fue reconocido como uno de los grandes jefes en batalla

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Durante su participación en la Guerra de 1982, tuvo a su cargo a 700 efectivos de la Marina y a 200 soldados del Ejército en los combates en Monte Tumledown, Sapper Hill y Monte William.

Aún hoy son recordadas sus tropas porque no pudieron ser derrotadas por los ingleses, y combatieron hasta que se les agotaron las municiones, aún después de la caída de Puerto Argentino y tras recibir la orden de rendición.

Tal fue su intervención en el conflicto armado, que los británicos destacaron en un documental que las fuerzas más difíciles de enfrentar en las Islas fueron las comandadas por Robacio.

"Yo no soy ni bravo, ni valiente, ni nada por el estilo. Soy un hombre común. Tengo miedo cuando cruzo la calle. Pero en Malvinas no pude tener miedo. No pude tenerlo porque creo que Dios no me dejó tenerlo y la preocupación por mis hombres, su entrega, obviamente, no me podían permitir el privilegio de tener miedo. Además, estábamos convencidos de que peleábamos por lo nuestro", declaró en una entrevista a 25 años de la Guerra.

Al recordar los días que pasaron en las Islas, Robacio explicó que es "muy difícil" entender las condiciones extremas que atravesaron quienes pelearon en Malvinas y reconoció que "el comandante de los gurkas" le escribió una carta para decirle que nunca jamás "pasaron tanto miedo" como cuando se enfrentaron a sus tropas.

"Todos los hombres que lucharon en Malvinas fueron muy valientes y no hay registros en el siglo XX de unidades que hayan sido bombardeadas durante 44 días y hayan combatido durante dos meses, sin relevo", recordó recientemente en una charla que se realizó el 25 de mayo, cuatro días antes de su muerte (foto).

Por su desempeño, Robacio fue galardonado con la medalla al Valor en Combate y el propio Batallón de Infantería de Marina 5 fue condecorado por el Congreso, en el año 2002.

Germán Stoessel, un ingenerio que participó en ese encuentro, recordó en C5N que al finalizar el evento, en el que Robacio se reencontró con parte de los soldados que comandó en 1892, el ex jefe de Infantería de Marina indicó: "Ahora me puedo morir tranquilo".

Y así fue. Robacio falleció el pasado 29 de mayo en el Hospital Español de Bahía Blanca, luego de 76 años volcados al servicio de la Patria.