No fue por molestar a los rivales, como tantas veces reclamaron los jugadores del circuito que hasta llegaron a presentar una carta a la ATP quejándose de las actitudes antideportivas de su colega: el austríaco Daniel Koellerer, más conocido como "Crazy Dani", fue suspendido de por vida al comprobarse que arreglaba partidos con la mafia de las apuestas deportivas.
Las primeras informaciones anuncian que el polémico tenista deberá pagar a su vez 100 mil dólares de multa. El ex jugador argentino Diego Hartfield fue uno de los primeros en reaccionar ante la noticia. En su cuenta de twitter, resumió en pocas palabras lo que piensan varios protagonistas del circuito: "Chau Koellerer. Como rompiste los h… Era hora".
Koellerer visitó la Argentina en varias oportunidades, en una de las cuales dio la nota al desquiciar a un joven Juan Martín Del Potro, quien sufrió todo su repertorio de mañas en un partido de la Copa Petrobras 2005: "Crazy Dani" insultó al tandilense, se burló de él y hasta insinuó con gestos que se drogaba.
Hace dos años, utilizó métodos más sutiles para dar el gran golpe en el Abierto de Acapulco, donde eliminó nada menos que a David Nalbandian, en la que calificó oportunamente como "la victoria más importante" de su carrera.
En un torneo disputado en Aracajú, 40 jugadores juntaron firmas pidiendo su exclusión. No lo consiguieron. En el marco de esa misma gira latinoamericana, no obstante, recibió el primer gran revés: en la qualy de Acapulco, después de insultar con vehemencia a su rival, el español Nicolás Almagro, fue suspendido por seis meses. Hoy, por otros motivos, con 27 años y ubicado en el puesto 385 del ránking, recibió la roja de por vida.