La planta "mágica" de Evo para la rodilla de Chávez

El presidente venezolano siguió los consejos de su amigo y par boliviano, Evo Morales, y recurrió a la chilca, una hierba para calmar la inflamación en su rodilla, que lo tiene a maltraer y que despertó un saludo de Cristina

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El bolivariano arrastra una lesión de su época como paracaidista en las Fuerzas Armadas. Está en reposo hace dos semanas, e incluso su tradicional programa dominical Aló Presidente debió transmitirse desde el Palacio de Miraflores.

Pero en los últimos días sus dolencias comenzaron a desaparecer. Es que está bajo un tratamiento que incluye la chilca, una "planta mágica" que le mandó el presidente de Bolivia, Evo Morales.

"Gracias a Evo, que me mandó la chilca, la hierba mágica. Me la he estado aplicando en cataplasma", aseguró el presidente de Venezuela, quien también agradeció a médicos venezolanos y cubanos que lo están atendiendo. "Evo, incluso, me explicó detalles de cómo se aplicaba, primero por teléfono y luego por escrito", explicó Chávez.

La Baccharis latifolia, más conocida como chilca, crece en montañas del continente americano. Según explicó el doctor Dr. Teodorico Sawaya, presidente del Instituto Venezolano de Medicina Natural, a BBC Mundo, "es un antiinflamatorio, un paliativo".

El especialista explicó que esta hierba contiene flores con resinas que se utilizan con fines medicinales para tratar heridas, contusiones y lesiones. Las cenizas de la chilca, un arbusto de entre un metro y dos de altura, son ricas en sales de potasio y sodio, útiles cuando hay una pérdida de líquido, y se utilizan para tratar el reumatismo. Sin embargo, Sawaya aclara "no es un curativo".

"La rodilla no da todavía. Anoche dormí muy mal", manifestó el pasado domingo al inicio de su programa Aló Presidente, que cumple hoy 12 años de transmisión, poco menos de lo que va de su mandato presidencial, que inició en febrero de 1999.

Tras agradecer "a todos quienes siguen pendientes" de la evolución de su dolencia, remarcó que "jamás" en su vida tuvo "un reposo tan largo".

Chávez reveló que el problema se remonta a unos 30 años, cuando como oficial del Ejército efectuó un salto en paracaídas en un entrenamiento castrense.

Pese a que "queda muy poco de la inflamación, todavía no estoy en condiciones de salir a la batalla", manifestó tras lamentarse de haber perdido, casi a los 57 años de vida, "la salud como de acero" que sostuvo lo ha caracterizado "desde niño".

Hace una semana, en una llamada telefónica a un programa de la estatal Venezolana de Televisión (VTV), dijo quela inflamación había disminuido un 80 %. Los médicos descartaron la realización de una intervención quirúrgica, aunque ello "no quita que pueda ser necesaria a futuro", subrayó.

El problema le obligaba a mantener reposo absoluto y por ello debió suspender una gira por Brasil, Ecuador y Cuba que iba a emprender la primera semana de este mes y últimamente a Nicaragua.

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