Evo culpó a Chile por el arresto de su zar antidroga acusado de narcotráfico

Enojado con el mensajero, el presidente boliviano criticó duramente al país vecino por la detención de su funcionario, René Sanabria. Le atribuyó segundas intenciones y lo acusó de deslealtad

El ex general y ex zar antidrogas de Bolivia se encuentra actualmente detenido en los Estados Unidos por narcotráfico. Pero en la investigación que lo llevó a la cárcel fue clave la participación de la Policía chilena.

Por este hecho, Evo Morales descargó su furia contra las autoridades chilenas en declaraciones al diario Página 7 de Bolivia. "Hubo una deslealtad. Si había una investigación (contra Sanabria), ellos podrían habernos informado. Es una obligación informarse de Estado a Estado, ¿qué interés habrá detrás de eso?", dijo Morales, insinuando una intencionalidad.

Los dichos del mandatario boliviano fueron condenados de inmediato en Chile. "La política de Estado de Bolivia es que cada vez que bajan en popularidad, convierten a Chile en su chivo expiatorio", dijo Hernán Larraín, senador UDI integrante de la comisión de Relaciones Exteriores.

René Sanabria, un ex general, era el jefe de la Policía antidrogas de Bolivia hasta que cayó por involucrarse en el mismo delito que debía combatir. La operación que dio con su captura fue conducida por la DEA y contó con la cooperación de las fuerzas del orden chilenas. Carabineros recurrió a agentes encubiertos para negociar una compra simulada de 144 kilos de cocaína en Arica. Los oficiales chilenos le entregaron a Sanabria 75 mil dólares en efectivo a modo de adelanto por el cargamento, que tenía como destino la ciudad de Miami.

A Sanabria se le atribuyen unos 13 envíos de esa droga, que sumaron en total 4,7 toneladas en algo menos de un año, de febrero de 2010 a enero de 2011.

La investigación sobre las actividades ilícitas a las cuales se libraba este funcionario de Evo Morales se iniciaron en mayo de 2010 en Chile y terminaron en febrero pasado con la detención de Sanabria en Panamá, acusado de narcotráfico.

Evo Morales reaccionó ahora acusando a Chile de deslealtad por no haberle avisado de que había una investigación en curso sobre su deshonesto asesor. El presidente boliviano se quejó del gobierno de Santiago: "¿Qué interés habrá detrás de eso?, espero que no sea interés de carácter geopolítico o una especie de agresión política, que siempre busca los Estados Unidos. Hay algo oscuro en ese tema".

Esta insinuación de que Chile habría actuado por intereses ocultos o bien al servicio de otro gobierno causó indignación y no tardaron en llegar las réplicas.

El presidente del Senado, Eugenio Tuma (PPD), replicó: "El Gobierno de Chile actuó bien. No existe ningún tipo de obligación de avisar a otro país sobre una investigación. Chile es soberano en esa materia".

Su par del PPD, Jorge Tarud, dijo que los dichos del mandatario boliviano "no se pueden dejar pasar" y que requieren de una respuesta del Gobierno.

El vicepresidente de la UDI y miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, Iván Moreira, llegó a pedir que la Cancillería chilena estudie "la suspensión de las conversaciones con Bolivia, hasta que Evo Morales tenga una actitud de mayor respeto".

Otros atribuyeron la actitud de Morales a la caída de su popularidad: "No es tolerable que cada vez que un presidente (boliviano) baje en sus encuestas, use la política exterior para desviar la atención. Desde el gasolinazo, Morales no ha dejado de atacar a Chile. Un día es el Silala, otro es el Día del Mar, ahora una investigación de drogas...", dijo José Manuel Edwards (RN).

La semana pasada se publicó en Bolivia un estudio de Ipsos Opinión y Mercado en el que el presidente altiplánico es evaluado negativamente en temas de corrupción y narcotráfico.

Tras analizar las declaraciones del presidente de Bolivia, en La Moneda tomaron la decisión de no reaccionar públicamente a sus críticas.