Durante 2009 y parte de 2010, las existencias bovinas evidenciaron una importante disminución producto de la sequía más significativa de los últimos 50 años. Destaca la Oficina Nacional de Control del Comercio Agropecuario que "las desfavorables condiciones climatológicas del bienio 2008/2009 provocaron la mortandad de un número significativo de animales".
Al respecto, sostiene el organismo que "como consecuencia de un cambio en las perspectivas del productor, durante el primer semestre de 2010 se crearon nuevamente los incentivos suficientes para retener las hembras y comenzar así la recuperación del rodeo bovino".
A partir de ahí la Oncca justifica "la importante caída en la participación en faena de las categorías (ternera, vaca, vaquillona) de hembras bovinas registrada entre mayo y agosto de este año, según datos proporcionados por el área de Gestión Estratégica de la Información del organismo. De esta forma, se faenaron hembras por debajo del nivel crítico de retención/liquidación el cual está situado en el 44 por ciento".
La participación en faena es el porcentaje representativo del género (hembra o macho) sobre el total de animales faenados. Durante agosto sólo se faenaron el 41.8% de hembras, lo que representa la participación más baja desde diciembre de 2006.
Si bien en junio la faena se mantuvo en el límite crítico ?sin excederlo- los totales del cuatrimestre dan cuenta de un significativo descenso en la participación de hembras.
Por último, resalta la Oncca que "estos datos muestran una mayor retención por parte de los productores ganaderos de hembras en condiciones de quedar preñadas, lo que producirá con el tiempo, un aumento en el stock de ganado bovino".