El 8% de todos los bebés nacidos en 2008 en los Estados Unidos es hijo de inmigrantes indocumentados. Este porcentaje duplica el de la población adulta sin papeles, que se calcula en un 4%, según revela un estudio.
La investigación del centro de estudios Pew indica que de los 4,3 millones de nacidos ese año en el país, 340 mil niños, tenían al menos un padre indocumentado.
El sondeo también detalla que las tres cuartas partes de los ilegales en los Estados Unidos son de origen hispano: en total cerca de 11 millones de indocumentados inmigrantes viven en tierras estadounidenses, el 75% es de origen latino.
El estudio también reveló que más del 80% de las madres indocumentadas que dieron a luz en años en los Estados Unidos llevaban en el país, por lo menos, un año; y muchas vivían en allí desde hace más de una década.
Según la investigación, los Estados Unidos tenía en 2008 más de 17 millones de menores hijos de inmigrantes. Esto significa que un 23% de todos los niños del país tienen padres que nacieron en otro país.
La gran mayoría de ellos son ciudadanos estadounidenses a pesar de que sus padres no lo son, casi cuatro de cada cinco.
Algunos sugieren un cambio en la enmienda constitucional número 14, según la cual todos los nacidos en los Estados Unidos son automáticamente ciudadanos del país, sea cual sea el origen de sus padres.
Esta ley establece que los menores deben esperar hasta cumplir los 21 años para poder solicitar la residencia legal para sus padres.