Buscan prohibir un polémico videojuego sobre violaciones

Rapelay es de origen japonés e incita a cometer violaciones contra las mujeres. Organizaciones en distintas partes del mundo realizaron campañas para sacarlo de la venta. En la Argentina tratan de impedir su descarga de internet

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Un videojuego de origen japonés que simula violaciones de mujeres y que generó una oleada de repudios y reacciones para sacarlo de la venta en distintos países se puede conseguir en la Argentina a través de internet en sitios de descargas y de subastas.

Ante esta situación y a partir de un llamado de atención de la Cámara de Diputados, la Dirección Nacional de Política Criminal, del Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, acaba de emitir un dictamen con una serie de recomendaciones para prohibir la distribución y comercialización del cuestionado software.

El juego se llama Rapelay (rape significa violación en inglés) y comienza con la salida de la cárcel del protagonista principal de la historia, un hombre que para vengarse de una adolescente que lo denunció por intento de violación de una amiga, decide abusar de ella, de su madre y de la hermana de 12 años.

Es un videojuego de rol de tipo interactivo: el jugador se mete en la piel del protagonista, del violador, y elige las formas de agresión. Puede violar virtualmente a las tres mujeres en una estación de tren, en un parque, en baños públicos.

El riesgo que corre el protagonista es que las víctimas puedan quedar embarazadas a medida que aumenta el número de violaciones. En esos casos, el violador debe obligarlas a abortar, de lo contrario pueden incrementarse las posibilidades de que la adolescente lo mate a puñaladas y finalizar el juego.

Entre otras medidas, la Dirección de Política Criminal, encabezada por Mariano Ciafardini, recomienda al Ministerio de Justicia "arbitrar las medidas necesarias para evitar el ingreso al país a través de las autoridades competentes" y "notificar a las empresas nacionales que brindan el acceso a Internet de las posibles sanciones penales que pueden caberles por la publicación del videojuego para la descarga ilegal o difusión de imágenes del mismo por su contenido ilícito", publica hoy el portal Página/12.

También aconseja prohibir la venta del producto en sitios de subastas argentinos, donde actualmente se puede conseguir. La Dirección de Política Criminal detectó que un usuario de la empresa Mercado Libre subastó el videojuego y finalizó la operación el 23 de setiembre de 2009.