"La revolución es grande, nadie pretenda frenarla, nadie podrá frenarla", comenzó diciendo Hugo Chávez en su discurso ante la ONU.
En ese marco, el caudillo pidió "al mundo, a Europa y a los Estados Unidos" que apoyen la revolución porque "es la salvación de la humanidad". "La salvación del planeta es amenazada por el capitalismo y el imperialismo", agregó Chávez.
"Este siglo es el siglo del socialismo" porque "el capitalismo no puede dar ningún cambio", aseguró el caudillo, quien afirmó que "la revolución recorre toda América Latina".
"Ya no huele a azufre aquí, huele a esperanza", bromeó Chávez en referencia a las expectativas que despierta el gobierno de Barack Obama frente al de su antecesor, George W. Bush.
Sin embargo, el polémico mandatario no dudó en cuestionar al presidente norteamericano al exigirle que "decida de una vez de qué lado está".
"Dios libre a Obama de las balas que mataron a Kennedy, y que así pueda mirar la verdad", enfatizó el caudillo. "¿Quién eres, Obama?¿Hay dos Obama? Yo quiero creer que es el que habló ayer (en la ONU)", agregó.
De este modo, Chávez se preguntó: "¿Qué espera Obama para levantar el embargo a Cuba?".
Por otra parte, el caudillo se refirió al golpe de Estado en Honduras, donde implicó a los Estados Unidos, al acusar al Pentágono de "apoyar a los golpistas".
Asimismo, Chávez se sumó al presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad, en su ataque contra Israel, porque Jerusalén "es el único país del mundo que apoyó a los golpistas de Honduras".
El caudillo destacó que, a su entender, en Honduras "el Estado fue tomado por la burguesía, por los ricos que se adueñaron de todo, que controlan todo".