Polémica por el traslado de los restos de Ceferino Namuncurá

Por orden del Vaticano, y tras el pedido de su familia, las cenizas del beato serán llevadas desde Fortín Mercedes, donde están hace 85 años, hasta San Ignacio, en Neuquén. Los vecinos se oponen al traslado

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Las comunidades de Pedro Luro y Fortín Mercedes, en el sur de la provincia de Buenos Aires, decidieron movilizarse para impedir este miércoles el traslado de los restos del beato Ceferino Namuncurá a la localidad neuquina de San Ignacio, donde está asentada su familia mapuche, como dispuso el Papa Benedicto XVI.

Vecinos de ambos pueblos, ubicados a unos 120 kilómetros al sur de Bahía Blanca, se oponen a la medida resuelta por el Vaticano y la consideran un "despojo", después de que las cenizas de Namuncurá descansaran en el santuario de María Auxiliadora de Fortín Mercedes durante 85 años.

Los restos del beato, fallecido en Roma el 11 de mayo de 1905 a causa de tuberculosis a los 18 años, fueron repatriados en 1924 desde Italia y llevados al extremo sur del territorio bonaerense, donde quedaron a cargo de sacerdotes salesianos, pero ahora son reclamados por su familia.

"La causa de Ceferino surgió de Fortín Mercedes y para todos nosotros es un ejemplo de vida (...) Vamos a tratar de evitar por todos los medios que se lleven los restos ", dijo José Luis Onorato, historiador aficionado de la localidad de Pedro Luro.

Se trata de un pueblo de unos 15.000 habitantes ubicado a tres kilómetros del santuario dedicado a María Auxiliadora, la patrona del Agro, donde se encuentra la urna con las cenizas de Ceferino, el "santito indio" a quien le rezan los enfermos de cáncer en busca de curación.

"Lo reclama la familia, que tiene sus derechos también. Pero ahora que es beato se lo quiere llevar, ahora que es famoso. Acá se lo cuidó, se lo veneró (...) Los familiares ni se acercaron a ver a Ceferino por más de 20 años", remarcó Onorato.

La comunidad Namuncurá de la que era originario el joven laico salesiano de orígenes mapuches y criollos está asentada en San Ignacio, a 60 kilómetros de la localidad neuquina de Junín de los Andes, y solicitó a la Iglesia que los restos de Ceferino sean trasladados hasta allí. El Papa Benedicto XVI otorgó luz verde al pedido de la familia del muchacho, nacido en 1886 en Chimpay, Río Negro (donde fue beatificado en noviembre de 2007), por lo que la urna con sus cenizas debería ser depositada en La Ruca, que quiere decir "casa capilla", en su idioma.

Está previsto que este miércoles a la mañana una comisión especial llegue a Fortín Mercedes -un sitio considerado como la frontera con la Patagonia a comienzos del siglo pasado- para encargarse del traslado, aunque los vecinos anunciaron que se movilizarán para impedirlo. Además, los intendentes Raúl Mujica, de Villarino, y Ricardo Curetti, del vecino partido de Patagones, iniciaron gestiones con el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, en busca de colaboración y de frenar la mudanza.

"Todo lo que vamos a hacer es pacífico -aclaró Onorato-, pero queremos que Ceferino se quede un poco más para preparar (su partida) como corresponde. Esto estuvo muy mal manejado y hay mucha bronca en la gente, porque se resolvió entre gallos y medianoches", remarcó el vecino.

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