En el zoológico de Berlín, una mujer de 32 años fue atacada por tres osos polares, luego de que saltara al foso de los animales, justo cuando estos estaban siendo alimentados por los cuidadores.
La víctima de la agresión pasó entre una multitud de personas que observaban a los animales, se quitó los zapatos, pasó la cerca de seguridad y se arrojó, desde dos metros de altura, al poso de agua. Ante esa secuencia, los osos se acercaron a ella y la atacaron.
Ante el grito de la multitud, los rescatistas hicieron todo lo posible por salvar la vida de la mujer, quien milagrosamente, y pese alas graves heridas recibidas por los mordiscos, sobrevivió a la agresión del famoso oso Knut, su hermano y su padre.
"Los osos hubieran podido hacerla picadillo. La mujer tuvo una suerte enorme", señaló Heiner Klös, el comisario del zoológico, publicó el portal español 20minutos.