Una multitud participó de la misa en homenaje al oficial asesinado

Vecinos y allegados de Aldo Garrido participaron de la ceremonia en la Catedral de San Isidro. El recinto estaba colmado por lo que la gente se amontonó en los alrededores. "No vamos a parar hasta dar con los autores de este hecho", dijo el Jefe de la Policía Bonaerense

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Vecinos y allegados de Aldo Garrido participaron de la ceremonia en la Catedral de San Isidro. El recinto estaba colmado por lo que la gente se amontonó en los alrededores. "No vamos a parar hasta dar con los autores de este hecho", dijo el Jefe de la Policía Bonaerense
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Al terminar la misa, el jefe de la Policía bonaerense, Daniel Salcedo, dijo el agente "es un ejemplo" y que "hay muchos hombres como Garrido en la Provincia de Buenos Aires".

También se refirió a la investigación del caso y reveló que el policía recibió cuatro disparos y no tres como se había dicho. Además, agregó: "No vamos a parar hasta dar con los autores de este hecho".

En la ceremonia también se hizo presente el intendente de San Isidro, Gustavo Posse.

Minutos antes de las 19, el Monseñor Jorge Casaretto declaró ante los medios que no iba a estar presente en la misa pero dedicó algunas palabras para la familia del policía asesinado y habló sobre la situación de inseguridad en la sociedad.

?Quiero hacer llegar mi saludo a la familia?, dijo y agregó que la Iglesia debe ?estar al lado de la gente que está sufriendo?. ?Garrido es un hombre muy querido en San Isidro, muy servicial, un vecino más que trabajaba en la seguridad?, expresó.

Casaretto también consideró que la inseguridad es una ?preocupación de toda la Iglesia? y explicó: ?La iglesia tiene dos misiones: acompañar a los que estén dolidos y promover foros vecinales para que crezca la responsabilidad de todos los ciudadanos. Tanto por parte de los políticos como de los vecinos debe haber una participación positiva?.

En tanto, el jefe de la Policía, Daniel Salcedo, confirmó que buscan a un hombre y a una mujer por el crimen. "Fue un brutal homicidio; salvaje y cobarde", expresó el jefe de la Policía Bonaerense, tras llegar al lugar del hecho.

"Estamos trabajando, están todos los grupos de servicio de calle, la DDI y todos los recursos humanos abocados a dar con estos autores, un hombre y una mujer", agregó el comisionado.
 
El hecho sucedió cerca de las 9 en Chacabuco 361, a metros de los tribunales, donde se registró un asalto, protagonizado por dos delincuentes que ingresaron a robar a un comercio de la marca Kevingston.  
 
El teniente Aldo Garrido había cumplido 29 años de servicios y, de acuerdo al relato de sus compañeros, era un "policía de alma que no quería jubilarse", a pesar de sus 62 años.
 
En el momento del atraco, pasaba por el lugar y advirtió el movimiento de los sospechosos. Quiso intervenir pero fue sorprendido por algunos de los delincuentes, quienes le quitaron el arma. Una vez reducido y, sin mediar palabra, le dieron tres tiros por la espalda, quitándole la vida.
 
En el lugar trabajan peritos de la Comisaría Primera de San Isidro para buscar pistas que permitan dar con los miembros de la peligrosa banda, que huyeron luego del robo y el crimen.
 
Hasta el lugar, ubicado a la vuelta de los tribunales de San Isidro, también se acercaron autoridades del Ministerio de Seguridad, para coordinar la investigación del terrible crimen.

El ministro de Justicia, Aníbal Fernández, se mostró consternado por el asesinato. "La muerte no tiene explicación; me impacta de la peor manera", admitió el funcionario.