Juan Pablo Cafiero confirmó en diálogo con Radio 10 que el Gobierno lo convocó para postularse como embajador argentino en el Vaticano, luego de que en la Santa Sede rechazaran la candidatura del ex ministro de Justicia, Alberto Iribarne, por su condición de divorciado.
"Estoy cometiendo una infracción pero espero que sea leve y que sea más producto de mi inexperiencia", anticipó el actual asesor del gobierno bonaerense, para luego detallar: "He tenido una indicación clara de no hablar hasta que esto no esté confirmado por quien tiene que otorgar el place, que es el Vaticano".
Así, y luego de semanas en donde se analizó un posible candidato para ser embajador argentino ante la Santa Sede, se conoció que el cargo habría sido ofrecido al ex ministro de Seguridad bonaerense, Juan Pablo Cafiero.
El nombre del frepasista figuraba en la lista de posibles candidatos, desde que asumió la mandataria Cristina Kirchner, quien en un primer momento propuso a el ex ministro de Justicia, Alberto Iribarne.
Alberto Iribarne había renunciado a la propuesta para representar al país ante la Santa Sede porque, durante el tiempo que transcurrió a la espera de una respuesta oficial, el ex funcionario contrajo nuevas obligaciones.
Hasta el momento, la embajada ante la Santa Sede está encabezada por el Encargado de Negocios, Hugo Gobbi.
El perfil
De 55 años, hijo del histórico dirigente peronista Antonio Cafiero, "Juampi" -como se lo conoce- siempre militó en el peronismo y en el campo social y de los derechos humanos.
Abogado, fundador del "Grupo de los Ocho" junto a Germán Abdala y Carlos "Chacho" Alvarez, fue ministro de Desarrollo Social de la Nación con la Alianza y de la provincia de Buenos Aires (2003 al 2005).
Luego del asesinato de los piqueteros Maximiliano Kosteki y Darío Santillán (2002), el ex gobernador Felipe Solá le solicitó que asumiera en el Ministerio de Seguridad.