Lactancia materna puede prevenir la celiaquía

La lactancia materna podría prevenir la enfermedad. Si bien tiene un componente genético, para desarrollarse necesita de la interacción de factores ambientales

A tal conclusión arribó un reciente Congreso Internacional sobre la enfermedad celebrado en Florencia, Italia, que determinó que "en la predisposición a desarrollar la Enfermedad Celíaca (EC) intervienen factores genéticos y ambientales que participan en los mecanismos inmunológicos que condicionan su desarrollo y evolución".

En el desarrollo de la EC hay varios genes involucrados, pero no se los conoce a todos, aunque el componente genético más importante depende de la presencia de los genes HLA DQ2/DQ8. Sin embargo, se puede ser celíaco y no tener esos genes, ya que otros, aún sin identificar, representan el 60% del componente hereditario de la enfermedad.

"Los genes son necesarios pero no suficientes para el desarrollo de la EC, por lo que es necesario profundizar acerca de la interacción entre factores ambientales y genéticos", se señaló en el congreso de Florencia.

Entre los factores ambientales que influyen se nombró a las "infecciones víricas en las primeras edades" y a "la ingestión de dosis elevadas de gluten, que en ciertas poblaciones como la sueca, se ha asociado con un aumento de la prevalencia de la EC".

Según los expertos la lactancia materna ejercería un efecto protector: "Se cree que pequeñas cantidades de gluten presentes en la leche materna, jugarían un papel inmunomodulador de la respuesta frente al gluten", señaló la especialista italiana identificada como E. Fabián en la publicación del Congreso.

En tal sentido, se estudia prolongar la lactancia materna en el momento de la introducción del gluten en la dieta del infante, para verificar si realmente previene la EC o simplemente retrasa la aparición de la enfermedad.

El estudio y las terapias
En Italia, se lleva a cabo un estudio multifactorial sobre 115 bebés con familiar celíaco en primer grado, para evaluar si la edad de introducción del gluten influye en el desarrollo de EC: a la mitad se les introduce el gluten desde el 4-6 mes, y al resto, entre el año y los 15 meses.

Entre las posibles terapias para modular la respuesta inmune frente al gluten, la especialista francesa N.Cerf-Bensussan comentó que una posible estrategia podría ser actuar sobre los mediadores de la inflamación y de la transformación o remodelación de la mucosa intestinal.

El investigador italiano L. Greco explicó que para prevenir la EC el primer paso es identificar a los sujetos con predisposición genética, para lo cual lo ideal sería hacer un estudio del tipaje del gen HLA a través del cordón umbilical de los recién nacidos.