Arsenal informó a través de su sitio oficial en Internet (www.arsenal.com) que el jugador brasileño nacionalizado croata, Eduardo Da Silva, estaba descansando en el hospital luego de su operación.
El técnico del conjunto londinense, el francés Arsene Wenger, ya sabe que no podrá contar con el futbolista lesionado por el resto de la temporada y posiblemente por mucho tiempo más, lo que significa que se perderá la Eurocopa de Austria y Suiza que Croacia jugará en junio.
El incidente fue tan impresionante que las estaciones de televisión decidieron no mostrar repeticiones de las imágenes, aunque diarios de todo el mundo publicaron fotografías de la fractura de Eduardo en sus páginas.
Desde el momento en el que se conoció el diagnóstico hubo una especulación generalizada acerca de que la carrera del futbolista, de 24 años, podría correr peligro.
Vedran Corluka, compañero de Da Silva en la selección croata, admitió que estuvo cerca de llorar cuando vio el incidente.
"Me puse muy triste porque Eduardo es mi amigo", declaró el jugador del Manchester City a la cadena Sky Sports News. "Cuando observé lo que le había sucedido quise llorar, porque él sólo es un buen chico y no se merecía eso. No quiero hablar de la patada. Pienso que el jugador rival (Martin Taylor) no quiso hacer eso y que simplemente ocurrió", expresó Corluka.
"Sólo estoy triste porque Eduardo no se lo merecía. El jugador hizo la entrada, pero no quiso llegar a eso, sino que tuvo mala suerte", agregó. El delantero del Arsenal, que nació en Río de Janeiro, es uno de los tantos brasileños que juegan para otros países tras
haberse trasladado al extranjero.
En su tierra natal era apenas conocido hasta que hizo su debut oficial como internacional ante Irlanda en el 2004. Fue contratado por el Arsenal en julio del 2007.