Quien era el principal sospechoso del crimen de Lucila Yaconis, José Humberto Giardino, detenido este miércoles en la ciudad correntina de Goya, donde utilizaba identidad falsa y trabajaba en un restaurante, quedaría descartado como autor del hecho.
Este mediodía se obtuvieron los resultados de un cotejo de muestras de ADN realizadas por la Justicia con la sangre de la mamá de Giardino, Olga Colangelo, y muestras de semen que se hallaron en la ropa interior de la joven, y dieron negativo.
Por tanto, si bien Giardino confesó haber asesinado y violado a otras dos jóvenes, no sería el autor del crimen de Yaconis. Aún así la Policía continuará la investigación y el hombre seguirá imputado en la causa hasta que se demuestre su absoluta inocencia en este caso.
Ahora el juez de instrucción porteño Rodolfo Cresceri dispuso la extracción compulsiva de sangre para obtener el patrón genético de Giardino. Hizo lugar al pedido del fiscal José María Campagnoli y le pidió al Juzgado Federal de Goya para volver a hacer el examen de ADN, que permita constatar definitivamente si se trata del asesino de Yaconis o no.
Giardino fue detenido la semana pasada, pero se encontraba prófugo desde el 17 de enero de 2002 cuando un juez de Ejecución Penal le otorgó una salida transitoria de 24 horas para que festejara su cumpleaños y desapareció.
En esa oportunidad, Giardino cumplía una condena por la violación y homicidio de la joven Andrea Fabiana Mugrabi, cometido en 1988 también en el barrio de Núñez.
En tanto, la policía entrerriana investiga también si Giardino es el autor del crimen de la adolescente de 14 años Mara Torales, violada y descuartizada en noviembre de 2002, en Concordia, donde al ahora nuevamente detenido se lo conocía como el albañil Carlos Verón.
En esta ocasión, dos familias tendrán justicia porque el violador y asesino confeso será juzgado por los otros casos, pero en la causa de Yaconis deberán seguir las investigaciones tras caerse la hipótesis del principal imputado.