Obeso fue enterrado en el ataúd más grande

El hombre murió en julio pasado como consecuencia de un paro cardíaco y su cuerpo tuvo que ser sacado por la ventana. Como era demasiado pesado, la caja funeraria fue tirada por caballos

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Un hombre de 317 kilogramos de peso ha sido enterrado en el ataúd más grande construido nunca hasta ahora en Gran Bretaña

: 2,3 metros de largo; 1,40 de ancho; 76 centímetros de profundidad y media tonelada de peso.Mark Bamber, de 38 años, falleció el pasado 28 de julio de un paro cardíaco.



Tras haber luchado toda su vida contra la obesidad, el fallecido pesaba 317 kilos, por lo que, cuando sufrió el ataque, los bomberos tuvieron que sacarlo por la ventana de su habitación para trasladarlo al hospital.



Según publicó el

The Manchester Evening News

(noroeste de Inglaterra), el fallecido no pudo ser incinerado, ya que el horno crematorio de su ciudad, Wigan, era demasiado pequeño.



El ataúd, a su vez, era demasiado grande para ser llevado en un coche fúnebre, por lo que fue transportado en una plataforma tirada por caballos.



El director de la casa de sepelios Thorley Smith, Alan Roby, aseguró que era la caja funeraria más grande construida en el país.



"No se trató de un ataúd convencional porque hubiera sido imposible dar la forma de ataúd con aquel tamaño, sino que se hizo una caja rectangular"."Debe tratarse del hombre más gordo jamás enterrado en el país", apuntó Smith. "El funeral superó la capacidad de todas las personas que participaron en él", añadió.