El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) leyó el veredicto sin dar a conocer los fundamentos, situación que se instrumentará en los próximos días.
Claudio Adrián Alvarez, fue condenado a reclusión perpetua por el homicidio de una mujer, el intento de asesinato y violación de la hija de ésta y otros cuatro casos de abuso sexual.
Los jueces Adolfo Calvete, Eduardo Gamboa y Diego Leif Guardia hicieron lugar al reclamo del fiscal Julio César Castro, quien coincidió con el abogado querellante Claudio Mazaira.
Ambos letrados habían afirmando que el procesado fue "sádico" y "no hay posibilidad de justificarlo" porque "no sólo comprendió y entendió" lo que hacía, sino que "lo preparó".
Alvarez fue condenado por el homicidio de Elsa Escobar, tentativa de homicidio contra su hija B. -de 13 años- y abuso sexual con acceso carnal contra ambas y otras cuatro víctimas, C.L., L.G., C.F. y A.D., éstas dos últimas también menores de edad.
?Cumplió 10 años de prisión y salió en libertad condicional. Cuando cometió los abusos estaba gozando de libertad provisional?, indicó el abogado de la familia, Claudio Mazaira, en Radio 10.
?Se comprobó que es peligroso para la sociedad. Si su hubiesen realizado los informes, no lo hubieran dejado libre. Ninguna violación es aceptable pero hay unas que son peor que otras?, sostuvo.
?Estoy tranquilo y me imagino que otra gente debe estar tranquila porque esta persona no le va a hacer más daño a nadie?, dijo Sandra Calvo, la hermana de Berenice, en Radio 10.
?Todos podemos estar tranquilos por muchísimos años de que Claudio Adrián Alvarez no va a estar en la calle y no va a atacar a nadie, a la madre de nadie, a la hermana de nadie y a la hija de nadie. Es la única tranquilidad que me llevo", expresó.
Los hechos contra Escobar y su hija se registraron la madrugada del 3 de diciembre último, los que tuvieron como víctimas a C.L y L.G. el 23 de abril de 2005 y los perpetrados contra las adolescente C.F. y A.D. el 30 de julio de ese año, todos en Núñez.
El condenado registra otras condenas (una de ellas a 16 años de prisión por violación y robo) y cometió los delitos "cuando gozaba de su libertad condicional".
Entre las principales pruebas que lo incriminaron, se destacaron los dichos de las víctimas, las pericias médicas y las huellas de la palma de una mano -que se identificó como la del agresor- en un ropero de la casa de Escobar, donde mantenía encerrada a la mujer mientras abusaba de su hija.
El fiscal Castro calificó a esa huella palmar como la "mano asesina" de Alvarez, a quien en varios ocasiones tildó de sujeto "indeseable".
En los alegatos, también se mencionó la pericia realizada en un calzoncillo de Alvarez, que arrojó la presencia de material genético de al menos tres personas, (un hombre y dos mujeres), cuyos grupos sanguíneos se corresponden con el del acusado y las víctimas.
Además, remarcaron que el examen de ADN realizado en base al semen que una de las víctimas (C.L.) aseguró que Alvarez eyaculó sobre su remera tras obligarla a tener sexo oral, determinó en un 99,9 por ciento que el agresor era el acusado.
Los familiares de las víctimas expresaron su satisfacción por el fallo y señalaron que "era lo que esperaba y ahora todos podemos estar tranquilos por muchos años".
La mayoría de los presentes en la sala de audiencias del cuarto piso de los tribunales de Lavalle 1171, rompieron en llanto, se abrazaron y aplaudieron la decisión de la justicia.
Por Telenueve el abogado Claudio Mazaira, se declaró conforme con la reclusión perpetua.
El letrado reveló que el condenado subió a escuchar su condena con un chaleco antibala.