Luego de repetir hasta el hartazgo que Juan Román Riquelme era el conductor natural de la Selección argentina, el director técnico José Pekerman se animó a sacarlo promediando el segundo tiempo, cuando no se encontraba participativo en el momento en que más se lo necesitaba.
Pekerman siempre apoyó a Riquelme y seguramente lo seguirá haciendo apesar de las críticas. En los últimos partidos, el juego del mediocampista del Villarreal fue cuestionada desde varios sectores de la prensa y se le reprochaba al entrenador que no se animaba a sacarlo.
Por el contrario, Carlos Tevez aprobó con sobras el primer tiempo y ha sido el mejor jugador de la cancha, con el estilo que lo consagró en Boca y en Corinthians: a sus habituales gambetas y caños que obligan a dos alemanes a seguirlo permanentemente, el de Fuerte Apache agrega un coraje y un despliegue digno de un partido de esta envergadura.
La presencia de Tevez era una de las más esperadas por los hinchas debido a sus buenas actuaciones a lo largo del Mundia, cada vez que le tocó entrar y hasta el momento, "Carlitos" no defrauda, sino que aprueba con creces el examen más difícil del Mundial.
En la última línea albiceleste, Roberto Ayala fue quien dio mayor seguridad y en el juego aéreo se mostró impasable, además de haber logrado el tanto que le daba el triunfo transitorio a Argentina.
Tras unos primeros minutos impreciso, Gabriel Heinze mejoró su performance y decidió no complicarse y las pelotas difíciles no las arriesgó.