Los secretos de Carla Conte

Curvas infartantes y simpatía a flor de piel han hecho de esta mujer una de las favoritas de los argentinos. Te contamos cómo fue su ascendente y veloz carrera

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Bella, exitosa, espontánea, humilde, auténtica y cordial, así es Carla Conte, la conductora de Jugados por amor, el programa de entretenimientos que se emite por la pantalla de Canal 9 de lunes a viernes, a las 15.

Justamente es allí donde los participantes exaltan su belleza y simpatía: "Sos divina, mandá saludos para todos, que en el barrio te aman", expresó uno de los concursantes del día lunes. Ella, siempre dispuesta, cumplió el pedido del hombre felizmente casado, a quien seguramente sus amigos le estarán más que agradecidos.

"Jugados por amor está buenísimo, es un crecimiento. Es otro lugar, en donde uno tiene que acomodarse y aprender. Todos los días tenemos gente nueva y el programa nunca es el mismo", expresó la joven conductora.

Si bien comenzó como bailarina y estudió comedia musical, Carla enfrenta las cámaras con una naturalidad envidiable. "Después de bailar realicé comerciales pero ya no quería ser modelo. No tenía el target de anoréxica, me rechazaban. Era más bien power, pulenta. Bueno, como ahora...", comentó durante una entrevista esta morocha de curvas infartantes.

Sin dudas Call TV, el programa nocturno de juegos de Canal 9, marcó un antes y un después en su carrera profesional, pero Conte, paso a paso, venía forjando una base más que interesante que comenzó con Tienes una cita, el ciclo del canal Cosmopolitan donde oficiaba de Cupido en un encuentro a
ciegas.

Condujo el mítico Feliz Domingo, algo que seguramente la convertirá en parte de la historia de la televisión, cocondujo junto a Martín Liberman Sabelotodo en la cadena Fox Sports, recibió propuestas de Adrián Suar para ser parte de Sin código, protagonizó la obra teatral Boeing Boeing y durante la entrega de los premios Martín Fierro fue parte de Alfombra roja, el programa especial que transmitió Canal 9 previo a la ceremonia de los prestigiosos galardones.

Con tanta calidez y sencillez, sin dudas la platea masculina la ama pero Carla tiene otra carta a su favor: es querida por las mujeres, que ven en ella una "chica de barrio".