- Un equipo de científicos dice haber hallado rastros de la civilización perdida de Tambora en Indonesia, aniquilada en 1815 por la mayor erupción volcánica que se haya registrado en la historia.
La erupción del monte Tambora el 10 de abril de 1815 enterró a los habitantes de la isla de Sumbawa bajo cenizas candentes, gases y rocas, y se le atribuyen unos 88.000 muertos. La erupción fue por lo menos cuatro veces más poderosa que la del monte Krakatoa en 1883.
Guiados por un radar capaz de penetrar bajo la superficie, investigadores estadounidenses e indonesios excavaron en una quebrada donde los habitantes de la zona habían hallado cerámica y huesos. Desenterraron restos de una casa con techo de paja, piezas de bronce y los huesos carbonizados de dos personas, todo en una capa de sedimento que corresponde a la época de la erupción.
El volcanólogo Haraldur Sigurdsson de la Universidad de Rhode Island, que encabezó la expedición, calculó que unas 10.000 personas vivían en el pueblo cuando se produjo la erupción, mucho más poderosa que la del monte Vesuvio, que enterró a la ciudad romana de Pompeya.
La erupción, al arrojar 400 millones de toneladas de gases sulfúricos a la atmósfera, provocó un enfriamiento global y lo que los historiadores llaman el "año sin verano".
Heladas en pleno verano boreal destruyeron cultivos en Francia, Alemania y el noreste de Estados Unidos.
La civilización de la isla de Sumbawa interesa a los investigadores desde que exploradores holandeses y británicos, al visitarla a principios del siglo XIX, escucharon un idioma que no se parecía a ningún otro en Indonesia, dijo Sigurdsson. Algunos creen que se parecía a las lenguas de Indochina. Pero poco después del arribo de los primeros occidentales a Tambora, la civilización fue aniquilada.
"La explosión eliminó el lenguaje, así de grande fue", dijo Sigurdsson. "Pero estamos tratando de devolverle la voz a este pueblo mediante nuestras excavaciones".
Algunos hallazgos sugieren que los habitantes de Tambora venían de Indochina o tenían lazos comerciales con esa región, dijo Sigurdsson. Por ejemplo, los cacharros de cerámica hallados son similares a los de Vietnam.
John Miksic, un arqueólogo en la Universidad Nacional de Singapur, dijo al ver un vídeo de la excavación que aparentemente el equipo de Sigurdsson halló una vivienda destruida por la erupción.
Pero él duda de que los tamboreanos llegaran de Indochina o hablaran una lengua de esa región. Si la cerámica de estilo vietnamita llegó a la isla, probablemente se debió al comercio a través de intermediarios, dijo Miksic.
En la excavación apareció el esqueleto ennegrecido de una mujer que probablemente se encontraba en su cocina. Cerca de ella había un machete y una botella de vidrio derretida. Los restos de otra persona aparecieron delante de lo que podría ser la puerta de la vivienda.
Integraron el equipo investigadores de la Universidad de Carolina del Norte en Wilmington y el Directorio de Vulcanología de Indonesia.