Pintó un cuadro con la sangre de su lengua

El retrato de un buda fue encontrado en un templo en China. El autor lo pintó con su sangre para demostrar la devoción hacia el sacerdote

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Un retrato del Buda Sakyamoni pintado con la sangre de la lengua del autor hace 67 años fue descubierto en el Templo Tanzhe, al suroeste de la capital china.

La pintura, de 60 centímetros de largo y 40 de ancho, representa al buda Sakyamoni sentado con las piernas cruzadas sobre un asiento rodeado de flores de loto con delicadas líneas y realizada según el estilo budista tibetano, reproduce hoy el portal de la agencia de noticias Xinhuanet de China.

De acuerdo con la inscripción que aparece en la obra, el autor pintó el retrato con la sangre de su propia lengua para expresar su devoción, la añoranza a su madre muerta y su deseo de que ésta se reuniera con los budas.

Según los registros históricos, el autor de la obra es Pu Ru, pintor de renombre en el país y bisnieto del emperador Daoguang (1821-1850) de la dinastía Qing, la última feudal de China.

Este año se cumple el 1698 aniversario de la construcción del templo y el vigésimo quinto aniversario de su apertura al público, y la pintura fue descubierta por trabajadores durante las obras de restauración con motivo de la organización de una exposición.

La pintura de Pu Ru es, según los registros chinos, una de las pocas sutras budistas realizadas con sangre humana que existen en el país.

Según la tradición budista, aquél que done su sangre para una pintura deberá evitar el consumo de sal y alimentos picantes durante seis meses, para preservar el esplendor del líquido.