«El tango forma parte de la vida de los argentinos, sobre todo de Buenos Aires»

Graciela y Osvaldo, de la compañía Baile Pasional Tango, que ofrecieron espectáculos y impartieron cursos de tango, milonga y vals, regresarán a Haro en agosto

Tras continuar su gira por Suiza, Valencia, Alicante, Alemania e Italia, Graciela y Osvaldo, volverán a Haro a deleitar con su show y ofrecer un seminario en el Ayuntamiento en agosto.

-Hay mucho desconocimiento sobre el origen del tango y sobre las milongas. ¿Pueden explicarlo?

-(Graciela). Dentro del origen del tango, los autores creen que primero fue el ritmo de la milonga, que es un ritmo más fácil y platicado. En realidad, los primeros tangos eran humorísticos, con más picardía, y se lacraban de la realidad social. El origen del tango es comprometido ya que surge entre la gente con necesidades y problemas, como los inmigrantes, los desarraigados, la gente que venía del campo hacia la ciudad buscando trabajo.

-Un ritmo repleto de mezclas.

-Claro. Este ritmo era bastante repicado porque era una mezcla de todas las músicas y de todas las gentes de distintos lugares. La milonga, además de un ritmo musical (al que siguen el tango y otras modalidades), también es el nombre del lugar donde la gente se junta a bailar.

-O sea, una sala de baile.

-Sí. En las milongas las parejas giran en la pista en círculos siempre en sentido contrario a las agujas del reloj y todo el mundo mantiene la misma dirección. En nuestros cursos enseñamos los movimientos básicos y proponemos que una de las cosas a cuidar sea desplazarse de esta manera porque es la forma de entrar y poder sentirte parte de ese desplazamiento al unísono; como si todos fueran cómplices de que eso continúe y poder darle paso a otro que viene más rápido o poder pasar a uno que va más lento.

-¿Cuántos años llevan dedicándose a bailar de manera profesional?

-(Osvaldo). Juntos hace ya seis años, pero cada uno por su lado ya llevamos de 15 a 20 años.

--(Graciela) Yo me dejé llevar por el tango cuando estuve dando clases al Ballet Folclórico de San Luis. Fue ahí cuando nos conocimos y juntos empezamos a reformular todo lo que cada uno tenía y a hacer una investigación más intensiva, a viajar muy seguido a Buenos Aires y a conocer las milongas. Así como ustedes recorren los bares, nosotros íbamos a las milongas de Buenos Aires.

-¿Cómo es la vida de unos bailarines profesionales de tango?, ¿cuántas giras como ésta suelen realizar?

-(Osvaldo) Todas las que se pueden. A veces llegamos a Buenos Aires y ya tenemos que volver a viajar pero, generalmente, podemos llegar a estar alrededor de un mes, más o menos. Aunque, últimamente, nuestra carrera está ante una encrucijada porque en Buenos Aires nos ofrecieron la dirección de la Escuela de Tango más antigua que existe, fundada por Virulazo y Elvira que fueron dos bailarines muy famosos de la época de tango argentino (el Show Tango Argentino de Claudio Segovia) y aceptar implica vivir allí permanentemente.

-Respecto a los cursos que imparten, ¿cómo se desarrollan?

-(Graciela)) Fundamentalmente, planteamos tango, milonga y vals, enseñar el baile de salón, eso que se hace en las milongas, que son las que hacen que el tango se mantenga vivo. En Argentina la gente sale de la oficina, se cambia los zapatos y se mete en la milonga. Ésta es la gente que ama, que vive el tango, que conoce todas las protestas, los músicos Hay gente que escucha los primeros compases de un tango y ya sabe quién lo canta, cómo es la letra y hasta en qué año se grabó. El tango forma parte de la vida de los argentinos, especialmente, de Buenos Aires.

-Bailar tango parece difícil para el no iniciado. ¿Su aprendizaje requiere mucha dedicación?

--(Osvaldo) En realidad, se aprende a bailar en el primer día. Es un poco un desafío nuestro que se fue instalando en nuestra manera de enseñar, a lo largo del tiempo y de la experiencia con miles de personas que han pasado por nuestras manos.

-No es un baile sencillo, insisto.

-El tango se puede bailar en la primera clase. A veces parece muy difícil, pero esto es porque la gente se forma un pensamiento equivocado, ya que creen que bailar tango es eso que hacemos arriba del escenario. Lo que hacemos ahí es la expresión popular del tango desde el punto de vista de los artistas que surge de la necesidad de proyectarse hacia el espectador.

-¿Qué es un tango social?

-Es el que se baila en una milonga, en un casamiento, un baile mucho más tranquilo, más sentimental e intimista. Es, quizá, la forma más sencilla de bailar porque solamente tienes que dejar que tu cuerpo se mueva al dictamen interior que te produce la música. Cuando al escucharlo sientes cosas muy adentro tuyo, en tu corazón y en tu alma, comienzas a sentir la necesidad de bailar. En ese momento aprendiste a bailar tango. Tienes que dejar salir eso que sientes dentro, sólo eso. Nosotros trabajamos en la primera clase desde el sentimiento. . El tango rompe con todos los individualismos de la época y permite que el ser humano se vuelva a abrazar, comunicándose con nuestro abrazo único e irrepetible.