TOC: ¿qué es el trastorno obsesivo-compulsivo?

Cada vez más personas son diagnosticadas con este síndrome. #JuntaMédica entrevistó a especialistas

Las obsesiones son pensamientos, ideas o imágenes inadecuadas y desagradables que se le imponen al sujeto de forma intrusiva y repetitiva generando un malestar clínico significativo.

El contenido de estas ideas es irracional, absurdo y moralmente inadecuado, por lo que desencadena angustia, duda y culpa al mismo tiempo.

El sujeto reconoce las obsesiones como ideas irracionales; sin embargo, no puede detenerlas y cae una y otra vez en rumiaciones inútiles y parásitas.

Los sujetos que padecen TOC tienden a mantener sus obsesiones en secreto durante mucho tiempo por vergüenza o temor a que los vean como locos. Suelen sentirse incomprendidos, ya que sus familiares apuntan a racionalizar ideas que el sujeto comprende que son irreales pero no logra manejar.

Las compulsiones o rituales son comportamientos o actos mentales repetitivos y estructurados de una manera rígida. El sujeto acude a ellos con el fin de aliviar de forma mágica la angustia o ansiedad que se despierta tras las ideas obsesivas.

Algunos sujetos incluyen a sus familiares dentro de sus rituales haciéndoles preguntas constantes sobre sus obsesiones, pidiéndoles que verifiquen o chequeen algo junto con ellos, que mantengan los mismos códigos de limpieza, etc. Todo esto tiene el fin de evitar la ansiedad o encontrar cierto alivio frente a la angustia que dispara la obsesión.

Características del pensamiento obsesivo:

· Intrusivo e invasivo (aparece repentinamente y de la nada).

· Absurdo, irreal e irracional.

· De carácter mágico.

· Desagradable, vergonzante, morboso y/o éticamente incorrecto.

· Dubitativo (las obsesiones hacen dudar al sujeto de sí mismo).

· Inútil y sin un propósito.

· Angustiante.

Características de las compulsiones o rituales:

· Secundarias a las ideas obsesivas. Nacen para reducir la ansiedad y angustia que despiertan las obsesiones.

· Comportamentales (verificación, chequeo, etc) y/o mentales (conteo, repetición de frases, etc.).

· Repetitivas, rígidas y estructuradas.

· Mágicamente conectas con la idea obsesiva.

· De orden adictivo. Dificultad para frenar el ritual o resistirse a él.

Tipos de pensamientos obsesivos:

· Contaminación.

· Agresivos.

· Sexuales.

· Somáticos.

· Religiosos.

· Coleccionismo o acumulación.

· Necesidad de orden y precisión.

· Duda o responsabilidad patológica.

Tipo de compulsiones:

· Lavado personal. (manos, cuerpo, zonas genitales, etc.)

· Limpieza de objetos.

· Verificación.

· Repetición de actos.

· Orden y simetría.

· Rituales mentales (repetir frases, palabras, números de la buena suerte, conteo, etc.).

· Coleccionismo.

Lavadores o limpiadores

· Las personas tienen la necesidad imperiosa de lavar excesivamente tanto sus manos o su cuerpo como un objeto. En general, hay una estructura rígida de cómo debe hacerse la limpieza conectada con un pensamiento mágico de contaminación.

Compulsión de verificación

· Las verificaciones son actos que se repiten una y otra vez con el fin de disminuir la ansiedad y se continúan de forma constante hasta que el sujeto sienta que esta se ha apaciguado por completo. Hay una tendencia en estos sujetos a querer comprobar mágicamente que no sucederá aquello que imaginaron. Los rituales más frecuentes son: abrir y cerrar el gas, la puerta, canillas, etc. y/o preguntar reiteradas veces a un familiar sobre su obsesión para que le dé seguridad de que lo que piensan no sucederá.

Ordenadores

· Son personas que tienden a acomodar ciertos objetos o situaciones en un orden determinado. Por ejemplo: ordenan sus placares por color, tamaño, etc., sin poder soportar si algo de ello se encuentra de un modo diferente. En general, el obsesivo no podrá irse a dormir por más cansado que esté sin antes haber terminado todos sus rituales.

Rituales mentales

· Las personas tienden a repetir palabras, frases o números sin sentido con el fin de aliviar la angustia o ansiedad que despertó algún pensamiento obsesivo o imagen desagradable. En general esa repetición debe realizarse de una forma estructurada sin olvidar ningún paso.

Por el Dr. Gustavo Bustamante, licenciado en Psicología y doctor en Psicología Clínica