La dramática historia de Nabatanzi, “la mujer más fértil del mundo”: tiene 44 años y 45 hijos

La ugandesa es un caso excepcional de hiperovulación. Tras un matrimonio forzado a los 12 años, tuvo su primer embarazo. Su incansable lucha por prosperar en un contextod extrema adversidad

Compartir
Compartir articulo
La mujer ugandesa Mariam Nabatanzi sentada frente a su casa con doce de sus hijos en Kasawo, Uganda, en 2017 (Grosby)
La mujer ugandesa Mariam Nabatanzi sentada frente a su casa con doce de sus hijos en Kasawo, Uganda, en 2017 (Grosby)

Mariam Nabatanzi, conocida como “la mujer más fértil del mundo”, ha captado la atención internacional por tener 45 hijos con 44 años. Esta madre ugandesa, procedente de la aldea de Kabimbiri, ha vivido una realidad marcada por desafíos y una extraordinaria capacidad de supervivencia. Su caso no solo destaca por su notable fertilidad sino también por las adversidades que ha enfrentado desde una edad temprana, incluyendo el abandono y un matrimonio forzado a los 12 años.

Según los especialistas en medicina reproductiva, la condición de Nabatanzi se debe a un caso excepcional de hiperovulación, que la lleva a producir múltiples óvulos en un solo ciclo menstrual. Charles Kiggundu, del Hospital Mulago en Kampala, ha señalado al diario The Sun, que este fenómeno es extremadamente raro, lo que ha llevado a Nabatanzi a experimentar 15 partos múltiples.

Criar a sus hijos como madre soltera en una sociedad que presenta numerosos desafíos para las mujeres en situación de vulnerabilidad ha requerido una inmensa fuerza y determinación de su parte.

La mujer ugandesa Mariam Nabatanzi sentada frente a la casa con su 
hija menor, Sudaisha (Grosby)
La mujer ugandesa Mariam Nabatanzi sentada frente a la casa con su hija menor, Sudaisha (Grosby)

Nabatanzi ha tenido que buscar alternativas para sustentar a su gran familia. A lo largo de los años, ha trabajado en diversos oficios, desde peluquera hasta vender hierbas medicinales. La responsabilidad de proveer alimento, salud, educación y vestimenta para su numerosa familia ha sido una lucha constante, evidenciando su incansable esfuerzo y la colaboración de sus hijos en las tareas domésticas para mantener a flote el hogar.

Mariam ha compartido su dolorosa experiencia de haber estado embarazada durante 12 años de su vida, enfrentando la abandonada por su marido y luchando diariamente para proveer alimento y cuidado a sus hijos. “Crecí llorando, mi hombre me ha causado mucho sufrimiento”, reconoció en una entrevista con la agencia Reuters sobre ese momento de su vida.

Aqui se muestra su casa junto con sus 12 hijos más chicos y el mayor posando en la foto. 
(Grosby)
Aqui se muestra su casa junto con sus 12 hijos más chicos y el mayor posando en la foto. (Grosby)

Mariam, oriunda de una aldea sencilla en Uganda, relató cómo desde muy joven asumió responsabilidades adultas, incluyendo un matrimonio impuesto a los 12 años con un hombre en los 40 y polígamo. Su ciclo de maternidad empezó poco después: dio a cinco pares de mellizos, cinco de trillizos y cinco de cuatrillizos.

El tamaño de las familias en África es grande. En Uganda, la tasa de fertilidad promedio es de 5,6 hijos por mujer, una de las más altas del continente, y más del doble del promedio mundial de 2,4 niños, según el Banco Mundial.

En distintas regiones de África, se observa una prevalencia de matrimonios a temprana edad entre las mujeres, donde muchas veces estas uniones son concertadas. En este contexto, es común que las familias numerosas, con más de cinco hijos, busquen alianzas matrimoniales entre sus descendientes y los de otras familias, perpetuando prácticas culturales y sociales arraigadas en algunas sociedades africanas.

En el continente africano, la cifra de niñas obligadas a contraer matrimonio antes de alcanzar la mayoría de edad supera los 130 millones. Proyecciones del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) indican que, para el año 2050, esta cifra podría ascender hasta 310 millones, evidenciando una profundización en la problemática de los casamientos infantiles no consentidos.

Esta impactante historia de Mariam Nabatanzi arroja luz sobre los profundos problemas sociales y de salud reproductiva que enfrentan muchas mujeres y niñas en Uganda y en todo el continente africano. Uganda, con una tasa de fecundidad de 5,6 hijos por mujer, resalta la necesidad urgente de abordar la autonomía reproductiva y los derechos de las mujeres y las niñas en la región. La experiencia de Nabatanzi subraya las complejas interacciones entre la cultura, la economía y la salud reproductiva en contextos de alta fecundidad y matrimonio infantil.

.