Una gran humareda se levanta en el corazón de Madrid. No se oyen sirenas, ni gritos, pero un gran bullicio sobrevuela la emblemática Plaza Mayor. Los aromas del Río de la Plata la conquistan. Allí, entre los edificios de arquitectura renancentista española, se llevó a cabo una ceremonia prodigiosa de sabores y ritmos llegados desde Argentina.
Una ceremonia que atrajo a alrededor de 1400 comensales y que contó con Francis Mallmann como chef responsable y con Germán Martitegui, a su lado, en esta gran cocina -o gran parrilla-. Ambos llevaron a cabo un impresionante "asado a los siete fuegos".
Los motivos del encuentro fueron múltiples. Por un lado, la ciudad comenzó así a festejar los 400 años de historia de este paseo turístico obligado y, por otro, Argentina acaba de finalizar su papel como Ciudad Invitada en la Feria Internacional de Turismo (Fitur); y durante toda esta semana volverá a estar en el centro de la escena gastronómica mundial, ya que se desarrollará la Madridfusión, un esperado encuentro de la alta cocina, que reúne a algunos de los más prestigiosos chefs de todo el planeta sibarita.
Sin dudas, un afrodisíaco. El humo impregnándolo todo, convirtiendo esta tradición en un festín multicultural, ya que no solo se acercaron argentinos deseosos de probar sabores de su tierra, sino también turistas y locales, cualquier persona de buen olfato y mejor apetito.
Entre esos curiosos estuvo Gustavo González, entrerriano, afincado en la ciudad desde hace más de 20 años, quien dijo a Infobae que es "la primera vez que se siente tan cerca del asado" en su larga estadía en Madrid. Es que la parrilla contó con el plato argentino por antonomasia, como también con pollo al hilo y diferentes cortes de carne, acompañados con verduras braseadas y ananá, también al fuego, de postre.
"El fuego en la Plaza Mayor es la representación más clara de la Argentina, porque a través del fuego nos expresamos con nuestra cultura y nuestra gastronomía. Es un placer estar aquí en España de nuevo para recomponer nuestra relación con este país", dijo Susana Malcorra, ministra de Relaciones Exteriores y Culto, de Argentina. Por su parte, el director general de espacio público del ayuntamiento madrileño, José Luis Infanzion Priore, sumó: "Existen múltiples nexos entre españoles y argentinos y la cocina es uno de ellos. Aquí no hay diferencias entre unos y otros".
Por su parte, Gustavo Santos, ministro de Turismo, comentó: "Nos generó una gran felicidad poder compartir un asado en domingo, como hacemos las familias en Argentina, con nuestros hermanos españoles".
"Este es un homenaje, no solo a los 400 años de la Plaza Mayor, sino también a este gran país", agregó.
Toda la comida que sobró en el evento, por iniciativa del ministerio de Turismo de Argentina, se decidió donarla a las entidades que nuclean a ciudadanos en "situación de calle".
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Otro argentino distinguido en el festival
Desde el punto de vista culinario y cultural, Argentina continúa expandiendo sus tradiciones alrededor del mundo. Y en el marco de este gran festival, el argentino Nicolás Catena Zapata, un pionero y visionario de actitud rupturista, fue distinguido con el premio Marca País.
El reconocimiento fue por su Bodega Catena Zapata, quien puso énfasis en el Malbec para que se conviertiera en uno de los productos más respetados y buscados del mundo. Gracias a la calidad de sus vinos, Nicolás Catena Zapata recibió el honroso premio que destaca a las distintas propuestas de los argentinos en el exterior.
"Acepto este premio en nombre de mi familia y todas las personas trabajadoras y dedicadas en nuestros viñedos. Estoy orgulloso de aceptarlo también en nombre de Mendoza, una región vitivinícola que produce grandes vinos para el mundo", aseguró.