El Instituto Fueguino de Turismo (InFueTur) y el Ministerio de Defensa de la Nación hicieron un anuncio inesperado. A partir de la temporada 2017 y 2018, la aerolínea LADE (Líneas Aéreas del Estado) iniciará vuelos turísticos entre Ushuaia y la Base Marambio, en la Antártida. Esta noticia significa un paso adelante hacia el turismo antártico, ya que hoy no llegan a la base vuelos comerciales y sólo se puede arribar a bordo de un avión militar.
Para lograr este cometido, ya se están evaluando cuáles deberán ser las mejoras a realizar en la infraestructura del aeródromo de la estación militar, que será equipado con radares y sistemas electrónicos para operar vuelos civiles. Además, el Ministerio de Defensa comprará los aviones de transporte turbohélice que serán operados por LADE.
Luis Castelli, presidente del InFueTur, confirmó oficialmente la decisión que fue tomada en conjunto con el secretario de Logística, Emergencias y Gestión Cultural del Ministerio de Defensa, Walter Ceballos, quien informó que "el trámite de la certificación del aeródromo de Marambio para vuelos civiles comenzó el año pasado y en enero confirmaron la habilitación". Pero, antes de comenzar a operarlo, quieren -y deben- hacer importantes mejoras en su infraestructura.
En diálogo con Infobae, declaró que "es muy importante para la Argentina que se concrete esta posibilidad de contar con vuelos entre Ushuaia y Base Marambio. No sólo para seguir consolidando a Ushuaia como puerta de entrada turística al Continente Antártico, sino por lo que significa en términos de reafirmación y presencia de nuestro país en esta zona estratégica mundial".
Además, el funcionario agregó que esto seguirá revalorizando a la ciudad como foco de atracción para el turismo internacional de alto nivel adquisitivo.
Castelli aseguró que la gobernadora de Tierra del Fuego, Rosana Bertone, recibirá al representante del Ministerio para avanzar en las gestiones. Por su parte destacó que con esta iniciativa estarán "poniendo un mojón muy importante para el turismo fueguino y argentino". Aseguró que ellos son los principales operadores de turismo antártico marítimo, y si avanzan en esta dirección, podrán consolidar a Ushuaia y a la Argentina "como operadores de esta modalidad de turismo antártico, tomando todos los recaudos ambientales y de preservación y cuidado que exige el Tratado Antártico".
El funcionario del InFueTur destacó que "existe una voluntad muy firme también del gobierno nacional para consolidar a Ushuaia como polo logístico antártico, y contar con una ruta aérea regular que una de manera permanente con aquel territorio va en línea con ese objetivo".
Castelli también señaló que tanto el ministro de Turismo de la Nación, Gustavo Santos, como el de Interior, Rogelio Frigerio, han reiterado su intención de ayudarlos a consolidar la logística y el turismo antártico desde Tierra del Fuego.
"La ampliación del Puerto de Ushuaia, la posibilidad de unir vía aérea de manera regular Ushuaia con Marambio, y la creación de un Centro de Interpretación Antártica en Ushuaia son los pilares de ese lineamiento estratégico", finalizó.
Un poco de historia
La base se encuentra ubicada en la isla situada sobre el mar de Weddell, muy cerca del extremo norte de la península Antártica. Descubierta por la Expedición Británica del capitán James Ross en 1843, fue denominada en principio como cabo Seymour. A partir de 1956, se la denomina Vicecomodoro Marambio, un homenaje al piloto de la Fuerza Aérea Argentina, Gustavo Argentino Marambio, quien el 1 de diciembre de 1951 y a bordo de un avión Avro Lincoln, denominado "Cruz del Sur", despegó desde Río Gallegos con rumbo a la base San Martín en bahía Margarita, en la que arrojó correspondencia y elementos de supervivencia.
La creciente actividad creó la necesidad de contar con una pista de aviación operable durante todo el año. De esta manera, la Fuerza Aérea Argentina se abocó a la búsqueda de un terreno apto para montar un aeropuerto y la isla Marambio se presentó como una de las mejores posibilidades. El 30 de agosto de 1969 comenzó la construcción de la pista. Tenía 300 metros de largo y se ubicaba en un terreno libre de obstáculos. La tarea demandó tres meses de trabajo. El primer avión en aterrizar en la pista fue un Havilland-Canada DHC-2 Beaver, que decoló de la Base Matienzo y aterrizó en la pista. La pista luego llegó a medir 800 metros.
Así fue como la Antártida dejó de ser un lugar completamente aislado del mundo, ya que a partir de su habilitación todas las bases antárticas nacionales y extranjeras pudieron estar comunicadas entre sí y con el resto del mundo durante todo el año. La base Marambio se destacó también como un punto clave al realizarse el primer vuelo transpolar intercontinental, efectuado por la Fuerza Aérea Argentina en diciembre de 1973. Además, en la base se desarrollan durante todo el año una gran cantidad de actividades científicas y de investigación.